Puntos destacados:
- Héctor Rosales abandonó su casa en Melbourne por tres meses para trabajar en un pub en el pueblo rural de Marybourgh, introducir platos latinoamericanos en el menú, y ver si él y su familia podrían trasladar sus vidas de la ciudad al campo.
- El objetivo de Meet the Neighbours era ver cómo ocho familias multiculturales podían adaptarse a la vida rural y al mismo tiempo ayudar a estimular la economía del pueblo de Maryborough.
- Maryborough alberga la población "más alta de blancos" en todo Australia. En la actualidad lucha por retener a los jóvenes y a mantener a su población de la tercera edad.
El chef salvadoreño de Melbourne Héctor Rosales, su esposa María y dos hijos, Rafi e Isabella, fueron una de las ocho familias seleccionadas para participar en el documental, Meet the Neighbours, una serie de SBS TV que se estrenó en la pantalla chica el año pasado y que ahora está disponible en SBS On Demand.
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El objetivo de la serie, denominada por sus creadores como “un experimento social”, era ver cómo estas familias multiculturales podían adaptarse a la vida rural y al mismo tiempo ayudar a estimular la economía del pueblo de Maryborough e inyectar diversidad cultural en uno de los lugares que alberga la población "más alta de blancos" en todo Australia.
Australia es una sociedad muy multicultural, así que creo que es importante que las ciudades rurales también lo reflejen.La presentadora del programa, Myf Warhurst, en entrevista con Canberra Times.
La serie de tres partes documenta las experiencias que tuvieron las ocho familias de diferentes nacionalidades en el pequeño pueblo de Maryborough, ubicado a más de dos horas de Melbourne en el noroeste de Victoria. La serie también explora cómo las habilidades, experiencias y talento de estas familias fueron aprovechadas por un pueblo que está luchando para retener a sus jóvenes y mejorar la vida para las personas de la tercera edad.
Los miembros de las nuevas familias llegaron armadas con varias especializaciones laborales; desde profesionales de la salud hasta un maestro, un periodista, un camionero, un atleta y estrealla de cricket y un chef salvadoreño.
Héctor Rosales, chef salvadoreño y uno de los protagonistas del documental Meet the Neighbours.
Pero las cosas no salieron según su plan.
Se veía un poco de racismo en ese pub y era uno de esos pubs un poco asquerosos.El chef Héctor Rosales.
“Las preparaciones de los alimentos eran todas congeladas, no había nada fresco y con eso yo tuve muchas dificultades”, explica a SBS Audio, el chef salvadoreño.
Héctor cuenta que quería introducir nuevos platos “norte americanos y latinoamericanos” en el menú, porque consideraba que funcionarían muy bien entre los clientes. Pero los dueños se mostraron reacios a cualquier cambio, incluso a las sugerencias para mejorar el estándar de la higiene y la calidad de los ingredientes que utilizaban para cocinar.
Las ocho familias seleccionadas para el experimento social, Meet the Neighbours. Credit: Blackfella Films/Jackson Finter
Agrega que a pesar de los contratiempos logró introducir algunos cambios en el menú que fueron muy bien recibidos por la clientela local.
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“Les dije, ´si no quieren hacer cambios a la comida latina, he trabajado muchos platos cuando era un aprendiz y les puedo enseñar´. Porque se podían hacer platos típicos australianos baratos que no eran intimidantes para los locales y que se podían hacer sin congelar… además cada vez que poníamos platos especiales en el menú se vendían todos, o sea… tuvieron la prueba de que sí hay gente en los pueblos que les gusta algo nuevo”.
Asegura que no tiene nada en contra de la comida típica australiana, pero se lamenta por la poca variedad que existe.
“Se ve lo mismo en todos los lugares, un parma, unas pastas que no tienen nada que ver con la comida italiana y fish n chips… sé que preparadas muy bien son comidas muy deliciosa pero hay tanto nuevo que la gente puede experimentar…”
Fish and Chips, un plato típico que se consigue en pubs en Australia. Source: SBS / SBS Food
“Después de 4 o 5 semanas me di cuenta de que no querían cambiar nada y que no íbamos a progresar con comida americana o comida latinoamericana, entonces empecé a perder la paciencia”, agrega.
“O me iba yo o se iban ellas y prefirieron dejarme ir”, señala.
Hacía más de cinco años que Héctor no trabajaba en un restaurante, pero como chef profesional, con extensa experiencia laboral en algunos de los mejores establecimientos de Melbourne, estaba feliz de trabajar en uno de los pubs más concurridos de Maryborough donde necesitaban personal en la cocina de manera urgente.
Les tuve que decir que no podía trabajar bajo esas circunstancias y que teníamos que cambiar cosas… y ahí fue cuando me di cuenta de que ellos no querían, o no les gustaba cambiar en lo absoluto.Chef, Héctor Rosales.
“Enfrente de las cámaras (los dueños) decían que querían probar cosas diferentes, que querían experimentar, pero en realidad solo querían a alguien que fuera a trabajar (por la escasez de mano de obra), que tome órdenes y que se quede calladito”, comenta Héctor.
¿Cómo es Maryborough?
Maryborough pertenece a la municipalidad Central Goldfields Shire, que inició un programa laboral para alentar a los inmigrantes calificados a mudarse al pueblo con el fin de aumentar la diversidad cultural de la población y llenar puestos de trabajo.
Héctor reconoce que su experiencia laboral en el pueblo mejoró cuando se fue del pub y encontró un trabajo en otro establecimiento donde la comida era de alta calidad y el personal que administraba las operaciones eran migrantes con visas temporales.
“Me fui a trabajar a otro lugar que quedaba más o menos en frente de la casa donde vivíamos… y ahí sí, me encontré con otros cocineros de muy alto calibre, con comida de muy buena calidad y todo era bueno, hermoso, limpio, todo nuevo y ahí hay varias personas de otros países; de Nepal y de la India. Porque (ese lugar) trabaja con una agencia que les manda trabajadores, y vienen de Sídney y Melbourne y se quedan a vivir en el pueblo por unos meses, y si les gusta se quedan, y si no les gusta, se regresan. Esa fue una experiencia muy buena”.
Los creadores de Meet The Neighbors permanecieron en el pueblo por tres meses, filmando a las ocho familias durante los altibajos de sus vidas diarias en la nueva ciudad. Héctor dice que su hija no se adaptó bien al cambio, por lo que la familia tomó la decisión de volver a Melbourne después de que concluyera la filmación.
Pero afirma que Marybourough “es un pueblo hermoso” que tiene muchos aspectos positivos, por lo que no ha descartado la posibilidad de retornar de manera permanente una vez que sus hijos crezcan.
“Definitivamente nos gusta mucho el pueblo… hicimos amigos con los que siempre nos estamos comunicando y siempre regresamos a visitarlos… y el espacio, la tranquilidad, el paso de la vida es más lento y es más agradable, es muy bonito… a mí me gustó y las muchas experiencias positivas que tuvimos”, comenta Héctor.
La serie Meet the Neighoburs está actualmente disponible en SBS On demand.
