Gabriela y Romina: estripers hispanas en Australia que luchan para desafiar los estándares de belleza

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La escritora erótica y stripper Romina Pistolas de origen chileno radicada en Australia (derecha) y la socióloga sexóloga y stripper chilena que vive en Australia, Gabriela Rivas.

En una sociedad como la australiana que tradicionalmente ha estado enfocada en los estándares de belleza femenina blanca, la aparición de mujeres estripers elocuentes de origen migrante ha provocado una nueva ola de positividad corporal y autoaceptación. La escritora erótica y estriper Romina Pistolas y la socióloga, sexóloga y también estriper Gabriela Rivas, ambas de origen chileno, conversan con SBS Audio sobre la importancia de impulsar cambios positivos en los estándares de la belleza femenina.


Puntos destacados:
  • A lo largo de la historia, la percepción de la belleza femenina ha experimentado diversos tipos de transformaciones.
  • Gabriela Rivas y Romina Pistolas, son dos estripers de habla hispana en Australia que desafían las normas tradicionales de belleza, promoviendo la inclusión y la diversidad.
  • La sexóloga y estriper Gabriela Rivas dice que lucha contra la presión extra para ser perfecta y contra la "presión para tener un cuerpo que puedas postear".

Información general sobre las invitadas:

Romina Pistolas: creció en la isla de Calbuco, al sur de Chile. Estudió traducción de idiomas en Santiago antes de emigrar a Australia. Después de un breve paso por Sídney se radicó en Perth, donde se involucró en el mundo de los stripclubs, convirtiéndose en bailarina exótica a tiempo completo. Allí conoció a su primer marido de quien se divorciaría cinco años después. A raíz de ese divorcio comenzó a explorar modos de expresión artística, que la llevaron a escribir su primera novela titulada “Carmen, o como me inicié en el negocio de bailar sin ropa”. También ha incursionado en la fotografía con un libro donde retrata el mundo de las strippers desde su posición de colega, a modo de backstage. Además ha realizado una exposición titulada “Si no te follo me muero” en una galería de arte en Santiago de Chile, donde expone su experiencia y la de sus compañeras, como trabajadoras sexuales. Ha sido entrevistada para diversos medios escritos de Latinoamérica y participado en programas de televisión como invitada. Actualmente reside en la ciudad de Melbourne junto a su novio, con quien lleva una relación polígoma.


Gabriela Rivas: se desempeña como socióloga chilena con una sólida trayectoria en investigación de género y educación sexual en la Universidad de Chile. En 2012, emprendió una aventura en Australia con una visa de trabajo temporal. La maternidad llegó en 2015 con el nacimiento de León Tupak, lo que la llevó a explorar nuevas formas de equilibrar la crianza y el sustento familiar, encontrando en el trabajo de stripper una opción que le permitía ser madre a tiempo completo. En medio de la pandemia de COVID-19 en 2020, decidió ampliar sus horizontes académicos y se sumergió en un máster en sexología en la Universidad Curtin. En 2022, fundó Empowered Intimacy, un negocio dedicado a ofrecer un espacio seguro desde una perspectiva de feminismo interseccional, donde las personas pueden explorar su autenticidad sexual y personal libre del condicionamiento del patriarcado, mejorando así la calidad de sus vidas y relaciones.

Gabriela también trabaja con múltiples artistas y organizaciones que buscan desestigmatizar el trabajo sexual, empoderar a las mujeres y derribar el patriarcado.

Transcripción de la entrevista

Gabriela: Yo creo que hay un discurso colectivo sobre la aceptación del cuerpo y sobre el rechazo a la gordofobia, pero sin embargo encuentro que hay una presión extra de ser perfectos, una presión de tener un cuerpo que puedas postear, o tener el cuerpo que todos ven en las pantallas. Es como que estamos invadidos de esa presión, por eso son contradictorios estos dos discursos. La presión es grande, pero al mismo tiempo hay un discurso en contra de esa presión.
 
Romina:  Yo siento presión por mí imagen, pero no necesariamente por la presión masculina, o porque tengo que presentarme de manera erótica o sexual para tener más seguidores en Instagram o TikTok, ¡No! La mayoría de mis seguidores, el 85% en TikTok son mujeres que me siguen, de 20 a 40 años, entonces ellas tampoco me quieren ver erótica. Lo que quieren, es verme empoderada de manera auténtica y que pueda decir, sí tengo pelos en el cuerpo y que los muestre, entonces la presión de imagen es de otro tipo.

SBS Spanish (Claudio Vásquez): Romina, ¿crees que puedes ser como un modelo para ciertas personas que también están buscando un referente que se acepte a sí misma y a su cuerpo tal y como es?

Romina:  Sí puede ser, sin quererlo también, simplemente siendo auténtica y a raíz del trabajo sexual y en TikTok.  Se me ocurrió un día subir un video y de repente tenía 60 000 seguidores, se hizo muy masivo para mis estándares, y la gente era como si pensaba ¿cómo se atreve a hablar de qué es estríper? ¿cómo se atreve a hablar de que es trabajadora sexual? Hay veces que tampoco estoy contenta con mi cuerpo, muchas veces, pero me guste o no lo he demostrado que no soy una persona necesariamente tan delgada como mis compañeras de trabajo. Me acuerdo que una vez subí un video donde salía yo con mi traje de trabajo de noche y era como puras tiritas y alguien me puso, ¡uy! parece un arrollado de huaso (un enrollado de carne de cerdo rellenado con rodajas de tocino, chiles y especias y atado con un hilo). A mí me dio risa y tomé ese comentario para hacer un video. A las seguidoras les encantó porque no me afectó, claro, porque alguien se puede ver afectado cuando te comentan algo negativo. Podemos escuchar 20 cosas positivas respecto a nuestro cuerpo, pero la única que nos acordamos es lo negativo que nos dijeron a los 13 años. Esa queda para siempre.
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Romina Pistolas, escritora erótica y stripper, en los estudios de SBS Audio, Melbourne.
SBS Spanish (Claudio Vásquez): Gabriela, justamente hablando de lo que dice Romina y de la presión que a veces se siente por la opinión o la crítica, y también lo digo en un tiempo donde hay una lucha feminista mucho más desarrollada, donde también hay una visión respecto a lo que las mujeres quieren y esperan ser, y también una lucha contra el patriarcado, y te quería preguntar, por ejemplo, como sexóloga y socióloga, sobre el efecto de los comentarios de los hombres, comparado con los comentarios de una mujer.

Gabriela: Creo que los comentarios que uno recibe cuando estás creciendo, no importa de quién vengan, son los que te van a marcar por el resto de la vida, lo que decía un poco Romina. El comentario que te hicieron a los 13 años se va a quedar contigo probablemente por mucho tiempo, a menos que hagas un trabajo muy dedicado para dejar esa presión, independientemente de si el comentario fue hecho por un hombre o una mujer. Tiene que ver con en esa etapa formativa de cuando estamos creando esa identidad. Los niños, tú los ves en los adolescentes, cuando empiezan a formar su identidad son esos los comentarios que en verdad se quedan con nosotros para siempre, y el trabajo feminista de empoderamiento tiene que ver un poco con poder darse cuenta de que esos comentarios vienen desde el patriarcado y que es importante poder rearmar tu autoestima desde tu propio sistema de valores. Preguntarnos, ¿quién quiero ser y cómo me quiero presentar? Lo mismo que hizo Romina al dar vuelta ese comentario y reapropiarlo con el sistema de valor que tú decides tener. Decir, por ejemplo, a mí me encanta este outfit, y poder apropiarse de esos comentarios. Requiere trabajo, pero no es imposible. 

Romina: Yo también pienso que nuestro oficio nos ha ayudado a entender muchas veces de dónde vienen esos comentarios, y de entender por qué alguien siente la necesidad de comentar acerca de tu cuerpo, tratando como de invalidarte. Nosotros lo hemos visto, con una cantidad de personas que se sienten más validadas con ellas mismas al bajarte a ti, una persona que se siente feliz y se siente cómoda. Nosotras lo hemos visto mucho en los hombres heterosexuales.

Gabriela: Creo que de vuelta está el tema de la niñez. Probablemente ese hombre, fue súper ninguneado por su familia, por su papá, por sus amigos, por su entorno, entonces una manera de generar efecto en el mundo es poder ningunear a otra persona. Es el típico proceso del  bullying siempre le hicieron bullying en el hogar, (entonces lo repite).

SBS Spanish (Claudio Vásquez): Romina, hablabas de tus redes sociales, que seguramente ha aumentado después de la publicación de tu libro, el que escribiste que se volvió bastante popular y hablabas también anteriormente de que recibes comentarios sobre tu apariencia física. Me interesa saber sobre el diálogo muchas veces con tus seguidores, sobre cosas, como por ejemplo tu cuerpo, o sea, ¿conversan sobre esas cosas? y ¿no sienten un poco que estás compartiendo algo que es íntimo? ¿o lo ves de otra manera?

Romina: Yo siempre soy bastante honesta y abierta con las cosas y con mis sentimientos. Y con mis amigos soy una persona que tiene poca vergüenza en ese sentido, entonces me ha gustado mucho el diálogo que se ha formado con la gente, hay un gran porcentaje incluso de hombres que me preguntan, ¿cómo puedo hacer para que mi pareja se sienta más segura de sí misma? Porque una parte muy importante también de la sexualidad es, al momento de estar en intimidad con alguien, es sentirte suficientemente segura y confiada para que accedas a lo que te va a entregar placer. Entonces me parece que yo, gracias al libro que escribí que fue tan honesto y no tuve intención de hacerme quedar bien, donde conté varias cosas que no me enorgullecen, como persona o como mujer y como ser humano, entonces siento que he dado pie para que la gente que lo ha leído y qué no lo ha leído pero que sabe más o menos a donde va, a que pueda sentirse con la confianza, o pueda pensar, quizás ella me va a ayudar a acceder esa parte de mí.

SBS Spanish (Claudio Vásquez): Bueno eso es bastante interesante y lo quiero tocar, voy a regresar sobre eso en un momento pero también te quería preguntar a ti Gabriela porque habíamos conversado anteriormente hace unos años con Romina cuando lanzó su libro y en el libro hay muchas confesiones, de personas también que van a un strip club y hablan de cosas que quizás no hablan con nadie y tú Gabriela que también has tenido esa experiencia de trabajo, pero también como sexóloga, socióloga, ¿son diferentes los tipos de confesiones que hace una persona dependiendo del contexto y el lugar que está?

Gabriela: totalmente. Encuentro que el stripclub es un lugar, es un confesionario, es muy honesto. Es un lugar en donde la gente va ... sobre todo para hombres, pero en general para todas las personas que van, hay algo de estar hablando frente a una persona desnuda que le baja todas las barreras y que son como confesiones... son intensas, son de esas cosas que nunca le han contado a nadie. Sobre todo como sexóloga cuando la gente va a un espacio de una terapeuta, todavía hay mucha tensión, hay muchas limitaciones a lo que piensan que es correcto y que no es correcto, siento que el alcohol también influye en el espacio del strip club, pero la gente se juzga mucho por querer más placer en la vida, porque no tenemos educación sexual en casi ningún país, educación sexual que este enfocada en el placer, en el embodiment, en el poder sentir tu cuerpo, descubrir tu cuerpo. Nadie, nadie nos ha enseñado eso. Entonces ni siquiera uno lo ve como un problema. La gente vive sus relaciones sexuales por años y no lo ve como un problema.
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Gabriela Rivas, socióloga, sexóloga y stripper.
Romina: también tiene que ver con el hecho de que socialmente nuestro trabajo está súper estigmatizado. Entonces no es que ellos corren el riesgo de encontrarse con nosotras en la calle porque en la calle vamos a pretender que no los conocemos, porque quién tiene más que perder somos nosotras según ellos.
 
Gabriela: … o quien los va a juzgar a ellos, si nosotras somos las estripers entonces se abren a placeres y a deseos.

SBS Spanish (Claudio Vásquez): Les quiero preguntar a las dos, por ejemplo, cuándo alguien no se aprecia, no se valora a sí mismo, y si bien escucha que es importante hacerlo, ¿cómo uno inicia a quererse si no se ha querido nunca?, o ¿si nunca ha sentido que su cuerpo es un objeto de deseo?

Gabriela: Creo que ese es un trabajo que requiere constancia. Yo creo que es bueno escribir las cosas que dices de tu cuerpo y después leerlas, imaginar que tú se las estás diciendo a una persona que amas; esa disonancia cognitiva que sucede ahí te va ayudar a darte cuenta que esa manera de hablarte, no es congruente con ningún tipo de experiencia positiva en tu vida, eso es algo como para empezar y a partir de eso empezar a darte cuenta cuando esa voz me empieza a decir qué feo, qué gorda estas, nadie me va a querer así … decir, ¿le dirías eso a tu amiga, a tu amante, a tu hijo, hija? Jamás, entonces, ahí empezar de a poco cómo a sacarle las patas a esa mesa para que esté más inestable y poder desde ahí empezar a trabajar el ejercicio. Hay un montón de ejercicios, cómo mirarte al espejo. Si no puedes estar desnuda, mírate con ropa y si te gusta tu hombro, mira a tu hombro y dile que está hermoso, empezar a trabajar con las partes de tu cuerpo, que te gustan.

Romina: Para mí también lo más importante ha sido dejar de compararme con otras personas Nosotros siempre estamos mirando o viviendo bajo unos estándares imposibles de alcanzar.

Gabriela: Y aprender que los cuerpos y la belleza son construcciones sociales. Poder desmitificar que ciertos cuerpos son merecedores de belleza y otros no, es un trabajo que requiere constancia y compromiso, pero no es imposible.

Para escuchar la versión más larga de esta entrevista, presiona el ícono de reproducción que se encuentra al principio de la página.



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