Puntos destacados:
- El 41 por ciento de los australianos cree erróneamente que la violencia doméstica es perpetrada por igual por hombres y mujeres.
- Datos de la Oficina Australiana de Estadísticas muestran que en la mayoría de los casos los hombres son los perpetradores de la violencia doméstica.
- El gobierno federal, junto con los las autoridades estatales y territoriales, tienen como objetivo poner fin a la violencia contra las mujeres y los niños en una generación.
Advertencia: Este artículo contiene referencias sobre violencia familiar y doméstica, y agresión sexual.
Dos de cada cinco australianos creen erróneamente que la violencia doméstica es perpetrada por mujeres en la misma proporción que los hombres, revelan los resultados de una encuesta publicada por la Organización Nacional de Investigación para la Seguridad de las Mujeres en Australia (ANROWS, siglas en inglés).
Más de 19.000 australianos mayores de 16 años participaron en la Encuesta Nacional de Actitudes de la Comunidad (NCAS, siglas en inglés) que se llevó a cabo en 2021. Esta consulta encontró que, si bien las actitudes generales hacia la violencia contra las mujeres han mejorado, todavía queda un largo camino por recorrer.
De entre los encuestados, el 41 por ciento creía que la violencia doméstica era perpetrada por igual por hombres y mujeres, un aumento del 23 por ciento en comparación con la encuesta de 2009.
Mientras que datos de la Oficina Australiana de Estadísticas muestran que los hombres son los perpetradores en la mayoría de los casos de violencia doméstica, solo el 57 por ciento de los encuestados en NCAS creía que ese era el caso.
“Es extremadamente preocupante que muchos australianos no entiendan que la violencia doméstica es predominantemente perpetrada por hombres contra mujeres”, dijo la directora ejecutiva de ANROWS, Padma Raman, en un comunicado.
Otros hallazgos preocupantes incluyeron que mientras el 91 por ciento de los encuestados creía que la violencia contra las mujeres era un problema en Australia, menos de la mitad (47 por ciento) creía que esta situación ocurría en su propio suburbio o ciudad.
Contrariamente a la evidencia, más de un tercio de los encuestados creía que era común que las acusaciones de agresión sexual se usaran como una forma de vengarse de los hombres, y que las mujeres que se enfrentaban a batallas por la custodia de los hijos a menudo inventaban o exageraban las denuncias de violencia doméstica como táctica para ganar ventaja en su caso.
Contenido relacionado:
Una de cada tres mujeres experimenta violencia física o sexual en Australia
Una de cada cuatro personas también creía que una mujer que no dejaba a una pareja abusiva era en parte responsable de que continuara el abuso.
Los resultados de la Encuesta Nacional de Actitudes de la Comunidad también mostraron un aumento de casi el 30 por ciento, entre 2013 y 2021, en el número de encuestados que consideraban que controlar a una pareja negándole dinero era una forma de violencia doméstica.
Además, cuatro de cada cinco encuestados (81 por ciento) tampoco estuvieron de acuerdo con que a las mujeres les resulte halagador que las persigan persistentemente, incluso si no están interesadas, un aumento del 68 por ciento en comparación con el 2017.
"Si bien estos hallazgos muestran cambios realmente agradables en las actitudes de los australianos hacia la violencia sexual, todavía tenemos un largo camino por recorrer para corregir las actitudes de culpabilizar a las víctimas y los mitos sobre violación", puntualizó Raman.
El año pasado los gobiernos federal, estatal y territorial establecieron un objetivo para poner fin a la violencia contra las mujeres y los niños en una generación.
Contenido relacionado:
La violencia de género es frecuente dentro de la comunidad latina
La ministra de Servicios Sociales, Amanda Rishworth, señaló que los resultados de la encuesta NCAS ayudarían a los gobiernos a comprender mejor dónde deben enfocar sus energías para alcanzar ese objetivo.
“Si todos tiramos en la misma dirección, podemos lograr esto, pero los gobiernos no pueden hacerlo solos”, dijo en un comunicado.
Poner fin a la violencia contra las mujeres y los niños es responsabilidad de todos y es asunto de todos.Amanda Rishworth, ministra de Servicios Sociales.
Una "pieza clave" para eliminar la violencia contra las mujeres y los niños es "hacer frente a las actitudes que pueden respaldarla", agregó Rishworth.
“Esto incluye actitudes que niegan la igualdad de género, que buscan limitar la autonomía de las mujeres en las relaciones y que cosifican a las mujeres y desprecian el consentimiento”, puntualizó.
Si tú o alguien que conoces está siendo afectado por violencia familiar y doméstica o agresión sexual, llama al 1800RESPECT, al 1800 737 732 o visita . En caso de emergencia, llama al 000.
El servicio para hombres , operado por No a la Violencia, puede ser contactado en el 1300 766 491.