Un incendio forestal que afecta desde el martes al puerto turístico chileno de Valparaíso destruyó, al menos, 245 casas hasta ahora, según informaron las autoridades el día de hoy.
El fuego, que se mantiene bajo control y que no ha dejado víctimas fatales hasta ahora, comenzó en medio de pastizales y arboledas, para luego avanzar rápidamente hacia casas de material ligero, por lo que la Policía, Bomberos y el Ejército chileno decidieron evacuar a decenas de familias que esperaban la Navidad.
Los residentes comenzaron a regresar al lugar al día siguiente para certificar las condiciones de sus viviendas, levantar los escombros donde se encontraban sus hogares y rescatar lo que pudieran de sus pertenencias.
El Ministerio del Interior de Chile informó que las causas de los siniestros están siendo investigadas, sin embargo, no se descarta que los incendios podrían haber sido intencionados.
La autoridad también informó que se reforzó la seguridad en todas las áreas y límites urbano rural, con el fin de evitar que “personas enfermas puedan seguir generando focos de incendio”.
Gonzalo Blumel, ministro del Interior, luego de reunirse con el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, y el intendente de la región de Valparaíso, Jorge Martínez, declaró que: “La fiscalía, en conjunto con la Policía de Investigaciones, ya está realizando todas las diligencias para poder determinar eventuales responsabilidades. Y de ser así, exigir las máximas sanciones, porque el daño que esto causa es gravísimo”, dijo.
12 bomberos han resultado lesionados y cerca de 2,000 personas se quedaron sin luz eléctrica.
El gobierno chileno comprometió 165 millones de dólares estadounidenses para combatir la difícil temporada de incendios, ante una dura sequía que afecta el centro del país desde hace más de una década.
