Las leyes para la legalización del uso personal del cannabis fueron aprobadas en septiembre de 2019 y provocaron controversia en la capital, ya que el gobierno federal está advirtiendo que las personas aún podrían estar cometiendo un delito penal bajo las leyes federales.
Pero algunos usuarios del cannabis argumentan que las leyes ayudarán a romper el estigma en torno al uso de drogas.
Es el caso de Evan*, un profesional que trabaja en Camberra. Su método para relajarse después del trabajo ha sido ilegal hasta ahora.
Evan (not his real name) has been using cannabis to unwind after work for a few years. Source: SBS News
Él trabaja como informático para una organización del Gobierno y utiliza un nombre ficticio, no quiere revelar su identidad debido al impacto que podría tener en su carrera.
"Algunas personas cuando van a casa se toman una copa de vino, y no se toman la botella, se toman una copa. Para mí, dar algunas bocanadas en el vaporizador o fumar un cuarto de un porro es suficiente para olvidar los problemas del día y refrescar mi vida. Ciertamente no tengo la intención de drogarme, para mí solo se trata de des estresarme un poco."
Evan ha recibido con agrado la noticia de que el territorio de la Capital se haya convertido en la primera jurisdicción del país en despenalizar el uso personal del cannabis.
Después de años de luchar contra la depresión y la ansiedad, él dice que el canabbis le ayudó a gestionar mejor sus problemas.
“Hubo un cambio enorme en mi personalidad: me volví mucho más extrovertido, más espontáneo, menos ansioso, menos estresado, menos emocional, menos enojado. Me relajé mucho y mi círculo de amigos se dio cuenta de eso, mi esposa en particular.”
Desde el 31 de enero, cuando las leyes entraron en vigor, es legal poseer hasta 50 gramos de cannabis seco o 150 gramos del llamado “cannabis húmedo”: cannabis recién cosechado.
Los adultos pueden cultivar dos plantas por persona, y hasta cuatro por hogar.
Los usuarios deben asegurarse de que las plantas no sean accesibles para el público o los niños.
El ministro jefe del Territorio de la Capital, Andrew Barr, dice que la ley es un reflejo de los valores cambiantes de la comunidad.
"Creo que refleja los valores de esta comunidad y además queremos que nuestra policía se centre en el crimen organizado y la producción a gran escala de drogas ilícitas. No queremos penalizar o estigmatizar a los usuarios, especialmente a los usuarios recreativos a pequeña escala", dijo Barr.
Labor's federal loss means the ACT will have a bigger budget deficit to pay for infrastructure. (AAP) Source: AAP
Sin embargo el gobierno federal ha advertido que bajo la ley de la Commonwealth todavía es un delito poseer cannabis y, a pesar del cambio en la ley local, los usuarios en el territorio de la capital aún podrían tener problemas con la justicia.
El primer ministro Scott Morrison, dijo que las agencias federales tendrán que hacer cumplir la ley.
"Los estados tomarán sus propias decisiones de acuerdo con sus propias prioridades y la complejidad de sus propios gobiernos y eso depende de ellos, por lo que esperaría también que las agencias federales hicieran cumplir la ley."
El miembro laborista de la Asamblea Legislativa que presionó para que se aprobara el proyecto de ley, Michael Pettersson, dice que el gobierno federal está siendo alarmista.
"Existe un delito de consumo de cannabis en la Commonwealth, no hay duda de eso, pero lo que estamos diciendo es que hay una defensa contra ese delito. La defensa escrita por el Gobierno de la Commonwealth es que si la posesión de cannabis está justificada por una ley estatal o territorial, eso proporciona una defensa completa", explicó Pettersson.
Expertos en drogas como la Dra. Nicole Lee del Instituto Nacional de Investigación de Drogas argumentan que los beneficios superan los inconvenientes.
"La guerra contra las drogas ha creado y mantenido un nivel de estigma en torno al consumo de drogas en general y continuará mientras continúe la criminalización del consumo de drogas. Uno de los beneficios clave de la despenalización y la legalización de otras drogas es que de ser una problema de justicia penal, pasa a ser un asunto de salud y derechos humanos."
Evan, el consumidor recreativo de cannabis, dice que el cambio de ley conducirá a un cambio de actitud.
"La idea de que alguien llegue a casa y se tome una copa de vino es el mismo concepto que alguien que va a trabajar, hace su jornada de nueve a cinco, llega a casa y se fuma un porro, y esa idea se está volviendo cada vez más normal entre la gente de mi generación."
Si bien Evan comprende que el consumo de cannabis tiene efectos en la salud a largo plazo, dice que no es una solución permanente.
La venta o el suministro de la droga sigue siendo un delito penal.
Uruguay y el comercio internacional de cannabis
Uruguay, el primer país del mundo en regular la venta de marihuana con fines recreativos a través de farmacias, quiere pasar a integrar el club de exportadores legales de la droga, que según datos de Naciones Unidas, en 2016 lideraba Reino Unido, con más de dos tercios del total, Holanda y Austria.
El país sudamericano ya está exportando cosechas de marihuana, como la que se produce en la ciudad de Nueva Helvecia. Tras ser cortada y secada, es preparada para su envío a Europa, Canadá y Australia.
La empresa estadounidense Fotmer instaló 18 invernaderos –un total de casi 30.000 m2 techados- para producción de marihuana con fines medicinales en Uruguay, al amparo de su revolucionaria ley que regularizó el mercado del cannabis en 2013.
La meta es clara: convertirse en un proveedor principal de cannabis de uso médico.
En el año 2019 obtuvo seis toneladas de producción. La segunda etapa llegará a 10 toneladas, luego 30, y el objetivo final es 400, para una inversión total de 15 millones de dólares americanos.
*Evan: nombre ficticio
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