A pocas horas de que el Senado de Argentina decidida este miércoles sobre la legalización del aborto, diversos colectivos feministas se unieron a la campaña "Pañuelazo Internacional" a favor de la legalización del aborto legal, seguro y gratuito en las ciudades de Sídney, Melbourne y Brisbane.
(Pañuelazo en Brisbane)
(Pañuelazo en Melbourne)
Source: Vicky GArcia
Source: Gimena Guardia
En el Senado se anticipa una votación reñida que parece favorecer a los que se oponen a la iniciativa en el país del papa Francisco y con una fuerte influencia católica.
"Queremos que deje de ser clandestino (el aborto)", defendió Vicky García, una argentina que organizó una de las movilizaciones en Sídney, al expresar que las movilizaciones internacionales son parte de "un momento histórico muy importante". "El aborto es ilegal en Argentina, si una mujer quiere abortar, va presa. Las mujeres que realizan abortos lo hacen de forma clandestina y ponen en riesgo sus vidas", agregó la joven feminista al instar a sus compatriotas a que "dejen de lado las concepciones religiosas e ideológicas y se pongan de lado de las mujeres".
Se trata de la primera vez que en Argentina se discute un proyecto de ley que permitiría el aborto gratuito hasta la semana 14 de gestación.
Los senadores debatirán el texto que se aprobó el pasado 14 de junio en la Cámara de Diputados con 129 votos a favor, 125 en contra y una abstención, en una maratónica sesión.
En esta ocasión de calcula que de un total de 72 senadores, 37 votarán en contra de su aprobación de este proyecto que permitiría que el aborto sea gratuito hasta la semana 14 de gestación.
A pesar de que parece que el proyecto pierde fuerza, "la batalla es muy intensa", comentó a SBS Spanish el politólogo Marcelo Leiras, de la Sociedad de Analistas Políticos Argentinos, al destacar el poder de las mujeres que apoyan la iniciativa para que se tome conciencia sobre el asunto.
Lleiras explicó que una parte de la población rechaza la legalización del aborto en Argentina porque "toca las convicciones religiosas de mucha gente" y tiene que ver con el punto de vista de "cómo uno concibe la vida y los límites de la autoridad del Estado".
El analista vislumbró una votación reñida e incluso no descartó que " presentándose un proyecto alternativo se consiga los votos necesarios para aprobar la ley", en alusión a propuestas que se barajarían como la rebaja del período para abortar de 14 a 12 semanas, entre otros.
Asimismo Lleiras destacó la presión de las manifestaciones en torno a la aprobación de esta ley, que ha motivado también que otros colectivos en todo el mundo se unan en apoyo.
"Creo que el tener más de un millón de personas en las calles mientras se vota en el Senado, va a poner mucha presión en los senadores y senadoras", precisó el politólogo.
De aprobarse la ley "no vamos a salir todas a abortar masivamente", explicó Vicky García, una de las organizadoras del "Pañuelazo" en Australia, al insistir que lo que se busca es que "las personas dejen de lado las concepciones religiosas e ideológicas y se pongan en lugar de las mujeres".
"Es cuidar la vida de la mujer, que pueda decidir porque ella tiene que decidir sobre la vida y su cuerpo", remarcó García.
Diversas ONG calculan que cada año se realizan unos 500.000 abortos clandestinos en Argentina y que un centenar de mujeres mueren por esas prácticas, según la agencia AFP.
Si se aprueba, Argentina se convertirá en el tercer país de América Latina que permite la interrupción voluntaria del embarazo, después de Cuba y Uruguay.
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