El gobierno australiano finalmente accedió a aceptar la oferta de Nueva Zelanda de reasentar refugiados realizada hace casi una década.
En 2013, los exprimeros ministros Julia Gillard y John Key llegaron a un acuerdo por el que 150 solicitantes de asilo al año serían reasentados en Nueva Zelanda.
Pero la Coalición decidió no seguir adelante con el acuerdo cuando llegó al poder, ya que le preocupaba que los refugiados fueran a Nueva Zelanda y luego viajaran de regreso a Australia y se establecieran aquí.
Puntos destacados:
- Nueva Zelanda reubicará a 450 refugiados en un periodo de tres años.
- Este acuerdo se pactó en 2013, pero el gobierno de la coalición se negó a cumplirlo hasta ahora.
- Según el Consejo de Refugiados de Australia, aún permanecen en el limbo 1.384 refugiados y solicitantes de asilo en Australia y en detención internacional.
La ministra del Interior, Karen Andrews, dice que existen salvaguardas para evitar que eso suceda bajo este acuerdo.
"Nuestra posición política no ha cambiado. (…) Cualquier persona que sea parte del acuerdo de reasentamiento con Nueva Zelanda no podrá venir a Australia de forma permanente, no podrá convertirse en ciudadano de Australia y no podrá quedarse aquí de forma permanente", dijo Andrews.
El ministro de Inmigración de Nueva Zelanda, Kris Faafoi, se mostró complacido de que Australia se haya puesto en contacto con su gobierno después de que finalizaran sus acuerdos de reasentamiento con Canadá y Estados Unidos.
"Australia se acercó a nosotros para ver si la oferta de 150 reasentamientos que se hizo en 2013 todavía estaba abierta. Obviamente lo estaba, y hemos estado trabajando desde entonces para afinar el acuerdo para llegar al punto en el que podamos anunciar esto hoy", dijo Faafoi.
Los defensores de los refugiados han acogido con satisfacción la voluntad de Nueva Zelanda de aceptar un total de 450 personas, pero aseguran que cientos de personas se quedarán sin una oferta clara de reasentamiento.Según el Consejo de Refugiados de Australia, aún permanecen en el limbo 1.384 refugiados y solicitantes de asilo. Unos 1.168 de ellos están en Australia, 112 en Nauru y 104 en Papúa Nueva Guinea.
Refugees on Nauru Source: AAP
Jorge Aroche, director ejecutivo del Servicio de NSW para el Tratamiento y Rehabilitación de Sobrevivientes de Tortura y Trauma (STARTTS), dijo a SBS Spanish que este anuncio era una buena noticia, y que era un “aporte muy importante para solucionar esta situación, esperemos, de una vez por todas”.
“Hay gente que ha muerto durante estos diez, años, unas muertes que se podían haber evitado”, dijo el psicólogo y director de STARTTS.
Según información de Asuntos Internos, mantener a alguien en detención en un hotel está costando $471.000 por persona al año.
Hay gente que ha muerto durante estos diez, años, unas muertes que se podían haber evitado.
En los últimos meses el gobierno ha estado liberando a cuentagotas a los solicitantes de asilo detenidos en hoteles y han surgido críticas desde la oposición asegurando que esta decisión tiene un componente económico, más que humanitario.
Aroche dijo que “ciertamente ha sido una pérdida de dinero”, pero añadió: “dudo mucho que esta sea la razón mayor por la que se haya llegado a esta situación, sino más bien que claramente desde un punto de vista internacional ha traído muchas críticas”.
“Y en lo nacional en muchos escaños, donde la gente ve la situación de los refugiados que se mantienen en Australia presos sin ninguna razón, como algo que no se puede seguir aguantando”, apuntó Aroche.