Sinopsis: Las importaciones de China a Latinoamérica representan el 40 por ciento, según revela un organismo de Naciones Unidas que confirma el avance de la nueva Ruta de la Seda en la región.
Además del impacto en las importaciones en casi todos los países, el gigante asiático controla importantes puertos y obras de infraestructura en la región a pesar del rechazo de Estados Unidos.
Puntos destacados:
- Según los informes de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en el pasado lustro, China incrementó sus inversiones en este continente dejándose una media de 10.000 millones de dólares cada año.
- En 2019, esta cifra alcanzó los 12.800 millones, sellando una tendencia que se mantiene desde 2008. Además, China se ha convertido en el principal socio comercial de Brasil, Chile y Perú y está cerca de lograr lo mismo en Argentina. Ahora mismo, para todo Latinoamérica, el país asiático representa un 40% de sus importaciones.
- La nueva influencia asiática en Latinoamérica comenzó en 2017, cuando Panamá rompió relaciones con Taiwán.
- Desde entonces, ya se han incorporado a la Nueva Ruta de la Seda los siguientes países: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
- Actualmente hay varios proyectos en gestación; uno de los grandes puertos cuya construcción avanza a paso firme es el de Chancay, en Perú. Se agregan los grandes puertos mexicanos de Ensenada, Manzanillo, Lázaro Cárdenas y Veracruz. En Bahamas, Freeport; en Jamaica, Kingston; en Panamá, Balboa y Colón; en Brasil, Paranaguá; y en Argentina, Buenos Aires.
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