Sinopsis
El bloque de la derecha, liderado por el Partido Popular, ha conseguido 169 diputados, junto con los 33 del grupo de extrema derecha Vox, y por otro lado, el bloque de la izquierda liderado por el Partido Socialista consigue 153, con los 31 del grupo de coalición de las izquierdas recientemente creado, Sumar.
Pese a la elevada participación (un 70,40%, la cifra más alta en unas elecciones generales desde 2008), ninguno de los dos bloques alcanza los escaños necesaria para garantizar la mayoría de los votos que se necesitan en la investidura en el Congreso y que permitan la gobernabilidad. Para gobernar se necesita una mayoría absoluta de 176 escaños.
El ganador de las elecciones ha sido el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, de 61 años, que se presentó a los españoles como un hombre tranquilo y moderado, pero la fórmula no bastó para lograr una victoria en las legislativas del domingo lo suficientemente amplia para asegurarse gobernar España.
Ex presidente regional gallego, Feijóo -a secas, como es conocido en España-, tomó las riendas del Partido Popular (PP, conservadores) hace un año con el objetivo de poner orden en una formación en la oposición desde 2018 y que acababa de atravesar una de sus peores crisis internas.
Tras el éxito de la derecha en las elecciones locales de mayo, este domingo repitió triunfo, esta vez agridulce.
La posibilidad de que el Partido Popular necesitara al partido de extrema derecha Vox para formar gobierno estable, perjudicó a la imagen que quería transmitir Feijóo y movilizó a la izquierda.
Pedro Sánchez (PSOE) está en mejor posición para pactar con otras fuerzas y alcanzar los 176 diputados de la mayoría absoluta en el Congreso que le harían presidente.
Con información de AFP
Escucha el análisis del politólogo y profesor en la universidad de Griffith, Ferrán Martínez i Coma. Presiona el icono bajo el título.