Canadá y los Estados Unidos acusaron a Irán de derribar el avión ucraniano que se estrelló cerca de Teherán a principios de esta semana, matando a más de 170 personas.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció este jueves que varias fuentes de inteligencia, incluidos los servicios canadienses, sugieren que el Boeing 737 que se estrelló fue "derribado por un misil tierra-aire iraní".
"Tenemos información de múltiples fuentes, incluidos nuestros aliados y nuestros propios servicios que indican que el avión fue derribado por un misil tierra-aire iraní. Puede que no haya sido intencionado", dijo en una conferencia de prensa.
Sin embargo, el primer ministro australiano, Scott Morrison, no ha querido ser tan vocal como sus socios internacionales, y ha dicho esta mañana que Australia tiene la misma información de inteligencia que Canadá y el resto de sus aliados con respecto a la tragedia del avión y afirmó que "no hay evidencias que indiquen que fuera intencionado".
Respecto a la posibilidad de una escalada de la tensión en la zona, Morrison ha dicho que el personal australiano en Irak está seguro.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, también expresó este jueves sus "sospechas" sobre la causa de lo ocurrido. Según varios medios, la inteligencia estadounidense está cada vez más convencida de que el avión fue derribado por error por Irán.
Irán pidió este jueves a Canadá que le comparta su información sobre el accidente. En un comunicado publicado en reacción a lo que llamó "ciertas puestas en escenas dudosas", el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán pidió a Canadá "compartir" esas informaciones con la comisión de investigación iraní. Asimismo, Irán invitó a Boeing, fabricante de la aeronave, a "participar" en la investigación sobre el accidente.
Las tensiones siguen siendo altas entre Irán y Estados Unidos después de que Trump ordenara la muerte del principal general militar iraní, Qasem Soleimani, quien fue asesinado con aviones no tripulados.
Irán respondió el martes con el bombardeo de una base militar en Irak donde se encontraban soldados estadounidenses, en un ataque que no produjo víctimas.
Ahora se cree sin embargo, que la caída del avión de pasajeros ucraniano es responsabilidad de Irán y parte de la venganza por la muerte de su general militar.
La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, la demócrata Nancy Pelosi [[puh-LO-see]], dice que el aumento significativo de las tensiones que siguió al asesinato es el resultado de la imprudencia de Trump y los suyos.
"No creo, en términos de lo que es de dominio público, que hayan hecho al país más seguro por lo que hicieron. Debemos evitar la guerra. Y la actitud arrogante de esta administración, es impresionante."
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