Las autoridades sanitarias advierten que se producirá una "catástrofe sanitaria en tiempo real" en Papúa Nueva Guinea, ya que el sistema de salud del territorio, ya muy deteriorado, se enfrenta a un brote de coronavirus, que aumenta con rapidez.
Papúa Nueva Guinea ha registrado cientos de casos de coronavirus en las últimas semanas y el martes informó de 49 nuevos casos de COVID-19, lo que aumenta la cifra oficial del país a 1.741.
Según el recuento, se han producido 21 muertes en el país, la mayoría de ellas en las últimas semanas.
Puntos destacados:
- Un brote de coronavirus amenaza al sistema de salud de Papúa Nueva Guinea, que se independizó de Australia en 1975.
- Papúa registra más de 1.740 casos de COVID-19 hasta la fecha, de los cuales 21 han fallecido.
- El martes se reportó 49 casos de coronavirus.
Jonathan Pryke, director del Programa de las Islas del Pacífico del Instituto Lowy, dijo que Papúa Nueva Guinea ha tenido "mucha suerte" desde el inicio de la pandemia.
"El COVID ha estado en la comunidad [pero] la vida ha continuado en gran medida con normalidad. Su suerte se ha agotado en las últimas semanas", dijo a SBS News.
"Los expertos sobre el terreno dicen que, sean cuales sean las cifras que se ven, añadan un cero al final y esa es probablemente la imagen más realista, debido a lo poco que se han hecho las pruebas".
El martes, el mandatario papuano James Marape dijo que había pruebas de "gran transmisión comunitaria" en el Distrito Capital Nacional que rodea la capital, Port Moresby, donde los trabajadores sanitarios han dado positivo al virus.
Pamela Toliman, investigadora principal del Instituto de Investigación Médica de Papúa Nueva Guinea, dijo que era difícil determinar con exactitud la causa del repentino aumento de los casos debido a la limitación de las pruebas, que hasta la fecha se han centrado en las personas que ya mostraban síntomas.
"En los últimos 12 meses... las pruebas en todo el país no han estado donde esperaríamos que estuvieran", dijo a SBS News.
"Probablemente hicimos lo mejor que pudimos, pero sin hacer pruebas generalizadas en todas las provincias, es realmente difícil de explicar".
Papúa Nueva Guinea ha concedido la aprobación de la vacuna de AstraZeneca y el gobierno anunció el martes que había conseguido 200.000 dosis de Australia y 70.000 de la India, cuyo despliegue comenzaría "con suerte en abril".
Sin embargo, el Sr. Pryke dijo que el tiempo es esencial y pidió a Australia que "rebusque en sus propios bolsillos" y ayude a que las vacunas lleguen antes a Papúa Nueva Guinea.
"Este no es un asunto que pueda resolverse en cuatro o seis semanas cuando AstraZeneca llegue a través de [otros países]. Australia tiene la suerte de que hemos manejado la pandemia tan bien que estamos en una posición privilegiada para poder dejar de lado nuestras propias necesidades. Estamos protegidos", dijo.