El Gobierno de Nueva Gales del Sur (NSW, siglas en inglés) está planeando establecer un programa alternativo de cuarentena para los estudiantes internacionales para facilitar su regreso a finales de 2021, como parte de su respuesta a la caída de los ingresos del estado provenientes por las exportaciones de la educación, un sector que aporta 14.600 millones de dólares.
Al revelar los detalles de la propuesta, un portavoz de la oficina del Tesorero de Nueva Gales del Sur, Dominic Perrottet, dijo que el gobierno estatal está desarrollando un plan para reactivar el sector de la educación que contempla que los estudiantes internacionales entren en el sistema de cuarentena.
"Cualquier plan aprobado incorporará todas las protecciones policiales y sanitarias existentes para garantizar la seguridad de la comunidad y de los estudiantes", dijo el portavoz a SBS Punjabi.
Puntos destacados:
- Nueva Gales del Sur planea poner en cuarentena a los estudiantes internacionales.
- El gobierno federal rechazó el plan de Victoria de asignar 120 plazas más para personas que entran a Australia por motivos económicos.
- A 6 de abril, 55.137 titulares de visados de estudiante de Nueva Gales del Sur estaban fuera de Australia.
Esto se produce días después de que el Tesoro de Nueva Gales del Sur invitara a los proveedores de alojamiento para estudiantes (PBSA) a presentar sus solicitudes para formar parte de un panel de proveedores elegibles disupuestos a poner en cuarentena a los estudiantes internacionales que entren a Australia.
Como parte del plan, las propiedades propuestas serán evaluadas en consulta con la Policía de Nueva Gales del Sur, la Sanidad de Nueva Gales del Sur y el Cuerpo de Bomberos y Rescate de Nueva Gales del Sur para evaluar su idoneidad para unirse al programa.
"El Gobierno de Nueva Gales del Sur sigue trabajando de forma constructiva con las universidades, los funcionarios de sanidad, los funcionarios de policía y sus homólogos estatales y federales para encontrar una solución que pueda funcionar junto con los límites de llegadas internacionales establecidos por el Gabinete Nacional para cada estado", explicó el portavoz de Perrottet.
Según datos oficiales, hasta el 6 de abril, había 55.137 titulares de visados de estudiante que están registrados para estudiar con proveedores de educación en Nueva Gales del Sur.
¿Qué ocurre en Victoria?
El estado reabrió su programa de cuarentena hotelera el 8 de abril y había presentado una propuesta al gobierno federal para reservar 120 plazas adicionales para aquellos que entran al estado por motivos económicos, incluyendo a los estudiantes internacionales e inmigrantes cualificados.
Pero el plan fue rechazado por el gobierno federal, que al parecer está dispuesto a dar luz verde a planes piloto que puedan acoger a los estudiantes que regresan a Australia.
Al tachar la decisión como un "decepcionante", un portavoz del gobierno de Victoria dijo a SBS Punjabi que el estado seguirá trabajando con el Ejecutivo de Scott Morrison para que se autoricen estas plazas tan pronto como se acuerde este asunto.
"Esperamos dar la bienvenida a los estudiantes internacionales de vuelta a Victoria cuando sea seguro hacerlo. El presupuesto actual prevé 33,4 millones de dólares para sentar las bases de una fuerte recuperación del sector", dijo el portavoz.
Las últimas cifras de la Oficina Australiana de Estadísticas muestran que sólo 200 estudiantes internacionales llegaron al país en febrero, de los cuales 40 regresaron a Victoria, en comparación con las 41.860 llegadas de estudiantes en el mismo periodo de 2020.
"A qualidade de vida da Austrália, o sistema educacional, isso tudo atrai o brasileiro,” diz o embaixador. Source: AAP Image/Julian Smith
Los estudiantes esperan luz verde:
Shivam Pahwa, un estudiante extranjero atrapado en la India, está luchando por terminar su diploma de cocina en línea, ya que es necesario completar la formación práctica para obtener su certificado de finalización.
Este joven de 21 años -que estudiaba en el Instituto Tecnológico de Brighton, en Melbourne, antes de marcharse a Ludhiana, en el Punjab, para recibir tratamiento médico- apuntó que nunca lo habría hecho si hubiera sabido que las fronteras permanecerían cerradas tanto tiempo.
"Espero que el gobierno nos dé algún tipo de garantía de que tienen intención de que regresen los estudiantes actualmente matriculados para que podamos planificar nuestras vidas", dice preocupado Pahwa.
"Estamos dispuestos a vacunarnos, llevar una prueba y un test de COVID negativo. También estamos dispuestos a pagar nuestros vuelos y la cuarentena del hotel. Ahora, todo lo que queremos es una luz verde del gobierno australiano", añade.
Críticas al sector
El 19 de abril, el ministro federal de Educación, Alan Tudge, denunció a las universidades por perseguir los ingresos de los estudiantes extranjeros.
En un comunicado de prensa, el ministro Tudge dijo que los proveedores de educación financiados con fondos públicos deben centrarse en su "función principal" de impartir educación a los estudiantes locales.
"Aquí tenemos una gran oportunidad: fortalecer nuestro enfoque de la educación internacional, para hacer crecer nuevos mercados en el extranjero, pero también para garantizar que nuestras universidades están cumpliendo con los estudiantes australianos. Al fin y al cabo, la función principal de nuestras instituciones financiadas con fondos públicos es educar a los australianos", afirmó.
El ministro Tudge dijo que tener más del 60% de las aulas con estudiantes internacionales de uno o dos países no optimiza la experiencia estudiantil de los australianos ni de los estudiantes internacionales.
"Esto es especialmente cierto si las universidades no están aplicando requisitos transparentes y rigurosos sobre el idioma inglés para los estudiantes internacionales, una preocupación planteada recientemente por el regulador, TEQSA", dijo en un comunicado de prensa.
Esto se produce días después de que Tudge señalara que los estudiantes extranjeros de países como la India no podrían regresar en gran número este año.
Sin embargo, dijo que el gobierno estaba abierto a recibir propuestas de jurisdicciones y universidades que puedan garantizar el regreso seguro de los estudiantes extranjeros a las costas australianas en pequeñas cantidades.