El demógrafo Bob Birrell del informe del Instituto Australiano de Investigación Demográfica (Australian Population Research Institute) recalcó en un informe publicado el lunes que las visas permanentes son una opción atractiva para un gran número de inmigrantes temporales o para las personas de países no occidentales que tienen familia o conexiones en Australia que intentan obtener la residencia permanente en Australia.
Las visas de pareja representan el 25 por ciento del total de las entradas permanentes al país. En el año fiscal 2016-17 se emitieron 47,825 visas y 39,799 en el siguiente año fiscal. Además hay un gran número de solicitudes en la cola.
Los argumentos de Birrell
“La razón principal por la que muchas personas logran obtener una visa de pareja es que Australia tiene una de las regulaciones más blandas en lo que se refiere a la elegibilidad de una pareja en el mundo occidental”, argumentó.
Birrell apuntó que estas regulaciones permiten a un residente australiano patrocinar a su pareja si tiene 18 a pesar de que “está desempleado, o con una pensión de la seguridad social y vive en casa. La única condición es que tiene que mostrar evidencia de que se tiene una “relación genuina”.
Pero algunos expertos en inmigración desestimaron este argumento que apunta a que los aspirantes a obtener la residencia permanente en Australia están aprovechándose de las visas de pareja.
Laavanya Paripurapavan with her partner Patricia on their wedding day. Source: Supplied
“No hay evidencias”
La demógrafa Liz Allen, de la Universidad Nacional Australiana, comentó a SBS News que “no existe evidencia que sugiera un abuso por parte de los solicitantes de la vía que abre las visas de pareja con el fin de estafar al gobierno y obtener la permanencia (en el país)”.
Allen recalcó que el proceso para solicitar la visa de pareja es costosa, larga y, a menudo, desgarradora.
“De hecho, el proceso para demostrar que se tiene una relación es bastante rigurosa y a menudo la evidencia que se necesita para convencer a los funcionarios del gobierno no está a la par de las nociones contemporáneas para reconocer una relación”, precisó.
Asimismo la demógrafa de la ANU indicó que el sugerir que muchos residentes australianos, generalmente asiáticos, retornan a su país de origen para elegir a su pareja es una “exageración xenofóbica”.
“Las afirmaciones que se hacen en este informe no ofrecen evidencia o muy poca de los datos que apoyan a estos argumentos”, apuntó Allen.
La propuesta para endurecer los requisitos
Por su lado, Birrell comentó a SBS News que si bien los adultos residentes australianos tienen el derecho de patrocinar a una pareja, un derecho que no cuestiona, considera que es necesario endurecer los requisitos referidos a la elegibilidad de las visas de pareja.
"No estoy diciendo que se abusa, lo que digo es que las provisiones son demasiado blandas…esto da a un gran número de inmigrantes potenciales la opción de intentar obtener una visa de pareja y ese es el problema”, subrayó.
Como parte del endurecimiento de los requisitos para obtener las visas de pareja, Birrell sugirió elevar la edad para patrocinar de 18 a 21, asegurarse de que el auspiciador pueda mantener a su pareja sin necesidad de recibir una ayuda social y confirmar de que la pareja tiene una relación genuina (que es lo que se pide actualmente) y nuevamente dos años después.
Actualmente los inmigrantes pueden vivir y estudiar en Australia mientras se tramita la visa de pareja.
Source: Getty Images/xavierarnau
La importancia de la familia para los inmigrantes
FECCA, el organismo que representa a las comunidades étnicas en Australia, considera que la insinuación de que las visas abren una vía para entrar al país está fuera de lugar.
“No es correcto sugerir que el proceso para obtener una visa permanente o temporal de pareja es fácil”, dijo la presidenta de FECCA, Mary Patetsos.
“La solicitud es rigurosa una vez presentada, las solicitudes demoran casi dos años para ser procesadas en un 75 por ciento de los casos…estas visas son caras, cuestan casi $8,000 por solicitud”, precisó.
Tanto Allen como Patetsos reconocen que existe una necesidad de ser estrictos con el proceso, pero también recuerdan que la reunión familiar es una parte importante de un sistema de inmigración.
“La familia es importante para todos y la reunión familiar ayuda a facilitar un afincamiento exitoso y contribuye sustancialmente al bienestar de los residentes permanentes y ciudadanos australianos con su pareja extranjera”, coincidieron ambas.
Las demoras
Allen manifestó que le preocupa el cuello de botella que se produce en las tramitaciones de las visas, que está vinculado a las intenciones del gobierno de recortar la cuota de inmigrantes permanentes. Para ella es más importante revisar las demoras que la vía misma.
“El proceso requiere pide una gran cantidad de información privada y personal para que sea examinada en el departamento gubernamental apropiado. Estas preguntas pueden ser extremadamente invasivas”, acotó.
Asimismo Allen puso el dedo en el aumento del número de visas de pareja rechazadas, así como de las parejas apelando estas decisiones o de los residentes australianos que se ven obligados a dejar Australia para estar con sus parejas.
“Se sugiere que el proceso se demora de forma deliberada y en algunos casos se rechaza en lugar de hacer un análisis a profundidad”, concluyó.
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