La tercera ciudad de Australia, Brisbane, levantó este lunes el confinamiento decretado tras descubrirse de un primer caso de la variante británica de COVID-19, sin que se haya registrado ningún nuevo caso de coronavirus.
Desde el viernes por la noche, más de dos millones de habitantes del Gran Brisbane estuvieron confinados por decisión de las autoridades.
La medida se tomó después de que un trabajador de un hotel que acogía a personas puestas en cuarentena contrajera la variante altamente infecciosa de COVID-19 descubierta en Reino Unido.
La premier del estado de Queensland en Australia, Annastacia Palaszczuk, declaró que el confinamiento se levantará el lunes a las 18H00 (08H00 GMT).
Se han realizado decenas de miles de tests y no se han detectado casos de transmisión del virus en la ciudad.
"Queríamos asegurarnos de actuar rápidamente, hemos actuado con firmeza, con decisión", explicó, y dijo que el confinamiento "no fue una reacción exagerada".
El uso de la mascarilla seguirá siendo obligatorio hasta el 22 de enero en interiores y en el transporte público, mientras que los restaurantes y bares estarán sujetos a nuevas restricciones en el número de clientes.
A mediados de diciembre los británicos informaron a la OMS de la existencia de esta variante más contagiosa que las cepas de covid-19 detectadas antes en Australia.El primer caso de contagio por la variante británica en Australia llevó a las autoridades a reducir el número de llegadas desde el extranjero.
Australia ha registrado más de 28.600 casos de covid-19 y 909 muertes, para una población de unos 25 millones de habitantes.