El próximo martes el gabinete de Malcolm Turnbull discutiría su política respecto al matrimonio entre personas del mismo sexo, pues a pesar de que la linea de la Coalición, según su propuesta electoral, era desarrollar un plebiscito, hay un pequeño grupo de sus miembros que quieren un voto libre al respecto.
Quienes se oponen al plebiscito lo hacen argumentando que lo controversial del tema abriría la puerta a una campaña de odio e insultos que afectaría a personas muy vulnerables, sobre todo adolescentes que aún están confrontando dificultades personales o familiares por su sexualidad.
Y dentro del partido Liberal, el senador Dean Smith está redactando un proyecto de ley privado sobre matrimonios entre personas del mismo sexo, renovando el tenso debate al interior de su colectividad.
Otros colegas suyos como los diputados Warren Entsch, Trevor Evans y Tim Wilson han indicado su apoyo.
El senador de Tasmania Eric Abetz, que se opone a la medida de Smith, ha dicho a la ABC que los parlamentarios votando en contra de su propio partido podrían amenazar la autoridad del Gobierno, lo que afectaría el liderazgo del Malcolm Turnbull.
Otros aseguran que una propuesta de que el plebiscito se realice a través de voto postal podría ser una alternativa, con la que la Coalición resolvería sus propias contradicciones, pero esto es algo que no cuenta con el apoyo del partido Laborista.
Cuando el proyecto del plebiscito llegó al Senado, se perdió por 33-29, ya que el Partido Laborista se unió a los Verdes, al equipo de Nick Xenophon y al independiente Derryn Hinch para derrotarlo.
La Coalición tenía a su lado cuatro senadores de One Nation, a David Leyonhjelm de los Demócratas Liberales y a la independiente Jacqui Lambie.
Se espera que el martes, durante la reunión del partido, los liberales voten de manera secreta para saber qué tanto apoyo individual tiene la propuesta del plebiscito, que Turnbull sigue defendiendo por ser una promesa de campaña.
Entre tanto, el estudio anual de Dinámicas, Ingreso y Hogares que está siguiendo la situación económica y social de más de 17 mil personas desde 2001, revela un sólido apoyo entre la comunidad australiana al matrimonio entre personas del mismo sexo.
En 2005, alrededor del 30 por ciento de los hombres en el estudio favoreció el matrimonio igualitario.
Más de una década después, este número ha aumentado a casi el 60 por ciento, y son los hombres jóvenes quienes lideran el empuje para el cambio.
Entre las mujeres, la proporción a favor ha aumentado a 67 por ciento.