Rodrigo Gallardo comenzó su camino por la música desde muy temprana edad, junto al charango y la zampoña. Su trayectoria incluye ser uno de los fundadores del grupo Matanza, con el que desarrolló -durante casi diez años- composiciones cargadas de influencias del folclore y la electrónica.
Cuenta con varias producciones discográficas publicadas, que forman parte del movimiento global de electrónica orgánica, donde nacen colaboraciones con diferentes hermanos y compañeros de ruta.
El origen de su sonoridad está en la música de raíz andina y latinoamericana, impregnada de la modernidad de los ‘samples’, ‘beats’ electrónicos, y bajos profundos capaces de comandar este viaje a través de la canción, las cañas charangos y guitarras, junto a letras que buscan la conciencia colectiva y la conexión ancestral.
En entrevista con SBS Spanish, Rodrigo Gallardo explica que su música es "una mezcla de diferentes influencias tanto en lo musical como en lo espiritual” y agrega que eso mismo es lo que busca transmitir a través de las letras, donde “se unen diferentes culturas y cosmovisiones”.
“Por un lado, tenemos el sonido de las máquinas y, por otro lado, los instrumentos orgánicos. Es una combinación, tal cual”, explica.
Rodrigo está catalogado como uno de los más importantes exponentes de la folktrónica latinoamericana, aunque nos dice que no le gusta que lo encasillen en categorías, pues siente que eso limita su creatividad.
Explica que la folktrónica es una mezcla de folklore y electrónica.
Suena como ‘beats’ de máquinas que provienen de la música techno, combinados con elementos folclóricosRodrigo Gallardo
Aclara que este género musical puede ser muy diverso: “como música del mundo, dependiendo del contexto. Es rescatar la música local y llevarla a ritmos más modernos y electrónicos”.
La conexión espiritual a través de la música
Para Rodrigo, la música tiene el poder de provocar diferentes sensaciones en las personas, lo que él aprovecha para transmitir sus propios sentimientos y su búsqueda por la propia sanación. Aunque algunas personas lo han llamado “el chamán de la música”, algo que también rechaza con humildad, dice que, aunque siente la conexión con lo espiritual, es algo espontáneo y natural.
Su origen estuvo en los sonidos tradicionales. Comenzó tocando el charango, el instrumento andino más presente en sus presentaciones y composiciones. Rodrigo dice que la electrónica se sumó después como una herramienta frecuencial. “Son frecuencias, sonidos y herramientas”, dice y asegura que la mezcla en sus composiciones sucedió de manera espontánea y natural.
Chilean musician Rodrigo Gallardo, Latin American exponent of folktronic music, who fuses traditional instruments and songs with electronic beats.
Todo comenzó con un charanguito
La música encontró a Rodrigo desde que era solo un niño. A los 7 años pidió un charango como regalo de navidad. “cuando vi el primer charanguito, supe que era lo que quería”, recuerda.
(el charango) ha sido mi compañero más duradero y le tengo un cariño especial. Me encanta cómo suena y lo que transmite.Rodrigo Gallardo
Después de formar su primera banda con su propia familia, Rodrigo cofundó la agrupación musical que lo catapultó a la fama en su país: Matanza. Grupo al que perteneció por una década, antes de tomar su propio rumbo y lanzarse como solista.
Con sus acordes techno-folclóricos, Gallardo persigue despertar conciencia espiritual que trascienda más allá de la piel: “comprender que no somos solo carne y hueso, sino que hay mucho más allá”, dice, y enfatiza en la importancia de conectar con la sabiduría ancestral.
Para escuchar la entrevista con el músico Rodrigo Gallardo, presiona la flecha en el botón de reproducción que aparece al inicio de esta página.