Sinopsis
A finales de marzo pasado, El Salvador vivió el fin de semana más letal en lo que va del siglo, tras la matanza de 87 personas. Según una investigación del periódico digital El Faro la masacre se debió al fin de un pacto entre el gobierno de Nayib Bukele y las pandillas para reducir los asesinatos.
El medio asegura que fue la respuesta del grupo criminal Mara Salvatrucha por la supuesta “traición” de las autoridades, que a través del Congreso declararon un régimen de excepción que en 50 días de vigencia dejó más de 30.500 detenciones de supuestos pandilleros.
El periódico digital publicó una serie de grabaciones que suponen la voz de Carlos Marroquín, director de Reconstrucción del Tejido Social de El Salvador, Carlos Marroquín, y uno de los negociadores de las pandillas en representación del Ejecutivo.
En otro audio, el funcionario del gobierno de Nayib Bukele y quien fue sancionado por Estados Unidos bajo acusaciones de corrupción y de negociar con las pandillas, dice que el acuerdo con la MS-13 no puede romperse.
Además, El Faro difunde un audio en el que Marroquín confirma que el presidente Nayib Bukele conoce la conversación con los cabecillas pandilleros y lo identifica como Batman.
Desde México, el periodista Carlos Martínez afirmó al medio nicaragüense El Confidencial haber contactado a supuestos portavoces de la referida Mara Salvatrucha, quienes les señalaron la relación entre los asesinatos y el "pacto que mantenían desde hace dos años y medio".
En agosto de 2021, el periódico El Faro reveló que una investigación de la Fiscalía General indicaba que el gobierno del presidente Nayib Bukele sostuvo en 2020 negociaciones con las tres principales pandillas del país dentro de penales de máxima seguridad, con la finalidad de conseguir la reducción del número de asesinatos en El Salvador.
A cambio, la Mara Salvatrucha-13, Barrio 18 Revolucionarios y Barrio 18 Sureños, plantearon una serie de demandas que incluyen mejoras en las condiciones de vida carcelarias y beneficios para sus miembros en libertad.
La investigación periodística citó como negociador el director de centros penales, Osiris Luna, quien negó que hubiera pacto con los criminales.
Escucha la entrevista haciendo clic en la imagen principal.
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