La alcaldesa oficialista de este poblado de la región central de Cochabamba fue rescatada por la policía antimotines en la tarde del miércoles, después de haber permanecido más de una hora en manos de una turba enardecida, que la sometió a un escarnio público.
Mientras tanto, el líder opositor regional boliviano Luis Fernando Camacho sumó a un influyente colectivo civil (Conade) a su intención de entregar personalmente una carta al presidente Evo Morales, que contiene la renuncia al cargo del mandatario.
Junto con Conade, liderada por los exdefensores del Pueblo Rolando Villena y Waldo Albarracín, actual rector de la universidad estatal de La Paz, Camacho rechaza una auditoría electoral que lleva adelante una misión de la OEA.
Paralelamente, los llamados al diálogo se multiplicaban tras violentos choques entre leales y opositores a Morales, que han dejado hasta el momento tres muertos y unos 200 heridos.
Sobre la crisis política en Bolivia, conversamos con el académico y analista político, Carlos Cordero.