El proyecto de ley de identificación de votantes del gobierno ha recibido acusaciones de intentar traer el Estados Unidos de Donald Trump a la democracia australiana, según argumentó el líder laborista Tony Burke en el parlamento el jueves.
“Se trata de socavar el apoyo a nuestra democracia aquí. Son exactamente las tácticas que vimos de Donald Trump, eso es lo que está haciendo este gobierno”.
Puntos destacados:
- Un proyecto de ley del gobierno federal podría obligar a los australianos a mostrar una identificación antes de emitir su voto en las próximas elecciones.
- La ley trata de evitar que se vote más de una vez, aunque el índice de fraude en las pasadas elecciones fue solo del 0,03 por ciento.
- Voces críticas apuntan a que esta ley podría excluir de las elecciones a personas de grupos marginados.
Las leyes de identificación de votantes propuestas por el gobierno tienen como objetivo prevenir el fraude en las urnas.
El primer ministro Scott Morrison dice que esto ayudará a evitar que los australianos voten varias veces.
“No es una propuesta sorprendente que cuando vayas a votar deberías poder demostrar que eres quien eres y proporcionar algún tipo de identificación para respaldar eso. Esa es una protección importante para nuestra democracia”, dijo Morrison.
La portavoz del partido laborista y miembro de las Primeras Naciones, Linda Burney, argumenta que las leyes podrían excluir a las personas de participar el día de las elecciones, especialmente a aquellas que pertenecen a grupos marginados.
“Muchas personas de las Primeras Naciones en realidad no tienen un certificado de nacimiento. No me refiero a unas pocas personas, me refiero a muchas”, aseguró Burney.
Por su parte, Ben Morton, Ministro Especial de Estado de Australia, dice que hay disposiciones para los australianos indígenas que no tengan formas tradicionales de identificación.
“Según esta legislación, ningún votante será rechazado de un centro de votación por ningún motivo. Este proyecto de ley permitirá a los australianos indígenas utilizar documentos de los consejos territoriales indígenas”, indicó Morton.
¿Cómo se han identificado los votantes australianos hasta ahora?
El sistema de votación en las elecciones federales de Australia exige al votante que llegue a un centro de votación a que facilite su nombre y dirección a un funcionario, quien marca su nombre en una lista.
También se le pregunta a la persona si ya ha votado en esa misma elección. Suponiendo que la respuesta es no, se le entregan sus papeletas de voto y el votante emite su voto.
Durante años se ha argumentado que el proceso es demasiado abierto al abuso y que una persona puede fingir ser otra fácilmente y emitir múltiples votos.
Sin embargo, la Comisión Electoral de Australia estima que durante las elecciones de 2019, la tasa de votación múltiple fue del 0,03 por ciento, poco más de 2,000 personas.
De ellas, 24 fueron remitidas a la policía federal australiana, pero ninguna fue procesada.El politólogo de la universidad de Griffith en Queensland, el doctor Ferrán Martínez i Coma, dijo a SBS Spanish que el problema de las votaciones múltiples en Australia no es tal y que además en muchos casos es debido a actos involuntarios.
Voters posting their votes at Byford North polling station on election day during the Canning by election, Western Australia, Byford, Sept. 19, 2015. Source: (AAP Image/Richard Wainwright)
“Muchos de estos 2,000 casos en muchas ocasiones es gente mayor que tiene Alzheimer o demencias y que no se acordaba de que ya había votado”, aseguró.
La Comisión Australiana de Derechos Humanos también comparte la preocupación por las leyes propuestas.
Su presidenta, Rosalind Croucher, dice que la integridad de las elecciones es vital, pero puede que esta no sea la manera de hacerlo.
“La Comisión considera que los métodos propuestos no son proporcionados. Y en un país donde no solo tenemos el derecho al voto, sino que se nos exige que lo ejerzamos, el privar de derechos o potencialmente hacerlo con ciertos grupos de nuestra comunidad no es un buen resultado”, opinó Croucher.
Exigir que las personas lleven identificación a las urnas sería un cambio importante en la forma en que se llevan a cabo las elecciones australianas.
El gobierno dice que esto alineará a Australia con otras democracias liberales como Estados Unidos, Canadá y Suecia, y promete que nadie será excluido de poder votar.
Hay que ser honestos, Australia tiene uno de los sistemas más íntegros del mundo.
El politólogo español, Ferrán Martínez, comparte su extrañeza de que en Australia no haya un sistema de identificación nacional como ocurre en muchos países del mundo, pero apunta a otros problemas más urgentes del sistema electoral australiano que habría que revisar.
“¿Como es posible que falte coordinación entre agencias estatales y federales?. Por ejemplo, la agencia electoral de Victoria no comparte su censo (electoral) con la agencia federal”, apunta Martínez.
“Antes de introducir una identificación, habría que generar un censo para todos los estados y la Commonwealth, aunque esto tendría consecuencias constitucionales”.
“Hay que ser honestos, Australia tiene uno de los sistemas más íntegros del mundo”, aseguró.
El proyecto de ley se votará en la Cámara de Representantes en las próximas semanas de sesiones a finales de noviembre.
Si se aprueba, se debatirá en el Senado, donde el gobierno no tiene la misma mayoría que tiene en la Cámara Baja.