Los principales líderes políticos, Anthony Albanese y Scott Morrison se enfrentaron de nuevo el domingo por la noche en un acalorado debate electoral en el que ninguno de los dos fue declarado ganador por la audiencia.
Los resultados sobre quién se desempeñó mejor en el debate según la audiencia de Channel Nine, la cadena organizadora del encuentro, fueron confusos. Por momentos los resultados favorecían a Scott Morrison, minutos después a Albanese, y al final del programa se declaró un empate.
El debate fue organizado a pocas horas de que se abriera la votación anticipada, que comenzó el lunes, y se escucharon los temas que han estado en el debate en las recientes semanas: la subida del coste de la vida y las tensiones con China y la seguridad nacional, entre otros.
A pesar de que los laboristas hicieron un anuncio sobre la subida de salarios como parte central de su plan electoral, no existe un compromiso concreto de que realmente puedan lograr un aumento salarial real por encima de la inflación.
Y a pesar de las presiones del costo de vida, ni la Coalición ni los laboristas tienen la intención de extender más allá de septiembre la reducción a la mitad y por seis meses del impuesto sobre el combustible.
El politólogo y profesor de la Universidad de Griffith, Ferrán Martínez i Coma dijo a SBS Spanish que es complicado renunciar a los ingresos por el impuesto a los combustibles.
“Eso implica muchos ingresos que se utiliza en el mantenimiento de las carreteras, que viene financiado en gran parte por ese impuesto”.
“En algunos sectores el gobierno federal tiene margen para subir los salarios, como en la sanidad y en el sector de los cuidados”, señala Martínez i Coma, quien también ve con cautela el que las empresas privadas estén dispuestas a subir los salarios.
“Lo último que quieres es que te pillen con una gran promesa que no puedes cumplir, lo que te puede acompañar por el resto de la legislatura”, apunta.
Por otro lado, Scott Morrison también fue cuestionado durante la pasada semana sobre el significado de la "línea roja" que China podría cruzar si establece bases militares en las Islas Salomón, y qué consecuencias tendría esa situación.
Durante el debate el domingo por la noche, Morrison se negó a decir qué sucedería realmente si se cruzara esa línea roja, mientras que criticó a Albanese por el recorte de presupuesto en defensa del último gobierno laborista.
El politólogo Martínez i Coma dijo que “están un poco a la espera de ver qué pasa con los acontecimientos y ver qué va sucediendo con la contraparte China, y actuar en función de los que vaya sucediendo, como es lógico”, dijo.
“Aunque está bien que los medios les exijan explicaciones sobre en qué se traduce, esto de la línea roja”.
Otro de los asuntos que están en cuestión durante la campaña es qué harían los principales líderes si no obtienen una mayoría absoluta, aunque por el momento, ni Morrison ni Albanese han explicado qué acuerdos harían para conseguir la gobernabilidad.
El profesor Martínez i Coma dijo que los acuerdos con los independientes serían necesarios, aunque habría que ver el peso de los Verdes y qué independientes salen elegidos.
“Lo importante es ver qué se negocia a cambio de la estabilidad parlamentaria y lo que es interesante es ver bajo qué políticas están compitiendo estos independientes: cambio climático, comisión de la integridad anticorrupción, o los temas de discriminación a las mujeres”.