El Gabinete del primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, nombró al exlegislador liberal Philip Ruddock para examinar si las leyes actuales del país son suficientes para proteger la libertad de credo.
Este anuncio se da en medio de las presiones por parte del ala conservadora de la coalición gobernante que busca que se incluyan excepciones a la ley para legalizar los matrimonios entre personas del mismo sexo que protejan a las personas que se oponen a estas uniones.
En un comunicado, Turnbull explicó que Ruddock realizará una evaluación para determinar si se necesita cambiar la ley para proteger las libertades religiosas, una tarea que deberá terminar el 31 de marzo próximo.
“Cualquier reforma para proteger la libertad de credo debe ser asumida con cuidado. Hay un gran riesgo de generar consecuencias inintencionadas cuando el Parlamento intente legislar las protecciones para los derechos y libertades básicas como la libertad de credo”, enfatizó Turnbull en su comunicado.
De este modo el debate en torno a las libertades religiosas se extiende más allá del plazo de antes de fin de año que se impuso el Gobierno de reformar la Ley de Matrimonios para permitir las uniones entre personas del mismo sexo.
Sin embargo, el jefe de la oficina del Tesoro, Scott Morrison, indicó que esta revisión encargada a Ruddock “no reemplaza” la necesidad de incluir excepciones para proteger la libertad de credo en el proyecto de ley presentado por Dean Smith.