Al menos 60.000 demandantes que apelaron contra las denegaciones de sus visas están esperando una respuesta de un Tribunal gubernamental a cargo de evaluar cada caso.
Un nuevo análisis realizado por el diario The Australian informó que entre julio de 2016 y agosto 2019 hubo un aumento del 257 por ciento en el número de casos de inmigrantes y refugiados que el Tribunal Administrativo de Apelación revisó.
Durante este período los casos subieron de 17.480 a 62,476.
El Gobierno de Morrison ha defendido la demora en el procesamiento de las apelaciones, argumentando que apunta a un mayor escrutinio dentro del sistema.
Pero el Dr. Daniel Ghezelbash, analista de leyes de migración de la Universidad Macquarie, está preocupado y opina que el Gobierno está tratando de adornar la situación para ocultar una verdad incomoda.
"Cuando no podemos contar con un proceso de revisión que funcione correctamente, la integridad del sistema para procesar visas sufre", dijo Ghezelbash a SBS News.El Gobierno de Morrison ha tomado medidas para reforzar los procesos de investigación de visas de migrantes y refugiados, incluido un mayor uso de la biometría y servicios de inteligencia.
Source: AAP
Hubo un aumento del 46 por ciento en las denegaciones de visas para el programa de migración permanente en 2017-18 en comparación con el año anterior. Esta cifra se ha mantenido estable en 2018-19.
El ministro de Inmigración, David Coleman, explicó que un mayor escrutinio en el proceso de investigación había resultado en un aumento en el número de rechazos de visas.
"Nuestros procesos de investigación de antecedentes son mucho más fuertes que los implementados bajo el partido Laborista y han visto un aumento en el número de visas rechazadas. No nos disculpamos por esto", dijo Coleman.
"La Coalición siempre administrará un programa de inmigración centrado en la integridad y la calidad".La tasa de rechazo promedio fue de 3.8% entre julio de 2018 y febrero de 2019.
Macquarie University's Dr Daniel Ghezelbash. Source: Macquarie University
Mientras tanto, más del 90 por ciento de los casos vinculados con visas de protección son rechazados.
"La naturaleza precaria de la existencia de estos solicitantes significa que no pueden echar raíces, integrarse o contribuir en la sociedad australiana”, dijo Dr Daniel Ghezelbash.