Se prevé que más de 400 mil personas perderán su empleo como resultado de las restricciones en Victoria, lo que elevaría la tasa nacional de desempleo al 10 por ciento.
El Tesoro también cree que el presupuesto económico se reducirá drásticamente en $12,000 millones de dólares aproximadamente en el trimestre de septiembre, según declaró el primer ministro Scott Morrison el día de hoy.
"Este es un duro golpe, un duro golpe", dijo Morrison frente a los periodistas.
Puntos destacados:
- El Tesoro prevé una reducción del presupuesto de $12,000 millones de dólares por causa de las restricciones de Victoria.
- 400 mil personas podrían perder su trabajo y la tasa nacional de desempleo llegaría al 10 por ciento.
- El PIB de Australia descendería un 2,5 por ciento.
Como resultado de estas estimaciones preliminares también se prevé que la tasa de desempleo general alcance un máximo cercano al 10 por ciento, mientras que la tasa real de desempleo, la que incluye a las personas que no buscan trabajo y a las que tienen cero horas de trabajo en este momento, ascendería al 13 por ciento.
"Se estima que el aumento del desempleo efectivo se sitúe entre 250.000 y 400.000", dijo el primer ministro australiano. "No se trata necesariamente de personas que han perdido su empleo, sino que también se incluye a aquellos cuyo empleo se ha reducido a cero horas", concluyó Morrison.
El economista jefe de la consultora KPMG Brendan Rynne no es optimista y espera que en la fase 4 en Victoria se vea una pérdida de producción económica de $830 millones de dólares en agosto, una disminución del 2,5 por ciento respecto al mes anterior.
Para los economistas el mes de septiembre podría ser aún peor, sobre todo si el sector de la construcción disminuye más su producción y aumenta el desempleo en las próximas cuatro semanas.
"Mis cálculos son que unos 130.000 trabajadores realizan tipos de trabajo que no podrán hacer desde casa", dijo Rynne a la AAP.
Las restricciones previas en Melbourne y el estado de Victoria, sumadas a las nuevas medidas aún más severas, podrían llegar a costar entre $10,000 y $12,000 millones de dólares. Estos números harían descender el PIB de la nación aproximadamente un 2,5 por ciento.
El cierre de negocios, la reducción de productividad de industrias y empresas afectadas en el estado, contribuirían al 80 por ciento de esta pérdida económica. La incertidumbre de los mercados y los problemas en las cadenas de distribución de bienes sumarían el 20 por ciento restante.
La economista principal de ANZ, Catherine Birch, había previsto que el desempleo nacional tendría un promedio de 8 por ciento en el trimestre de septiembre y que aumentaría al 8,5 por ciento en el trimestre de diciembre.
"A la vista de ello, un crecimiento más débil del empleo debería dar lugar a un mayor desempleo", dijo Birch en una nota a los clientes.
"Pero sigue sin estar claro cuánto más aumentará la tasa oficial de desempleo debido a las restricciones más estrictas en Victoria y esto está sujeto a cambios de la política y los movimientos de participación".
El gobernador del Banco de la Reserva, Philip Lowe, cree que la tasa de desempleo podría alcanzar el 10% a finales de año, aunque admite que es difícil hacer pronósticos ante una pandemia.
Esta cifra sería superior al 9,25 por ciento previsto por el Tesoro hace dos semanas y antes de las restricciones más duras impuestas en este momento en Victoria.
El Banco de la Reserva dará a conocer una serie de escenarios posibles para las perspectivas económicas cuando publique su declaración trimestral sobre la política monetaria este día viernes.