Las largas colas de viajeros internacionales que esperan la autorización de inmigración en los aeropuertos australianos pronto se podría convertir en algo del pasado con los nuevos cambios para pasaportes que entrarán en vigor a finales de este mes.
Con una enmienda a la Ley de Migración que entrará en vigencia el 17 de noviembre, no se requerirá que los viajeros presenten sus pasaportes para establecer su identidad, si sus detalles ya se encuentran en formato electrónico.
Actualmente las autoridades comparan una imagen de la cara y los hombros del viajero con la imagen y los detalles que aparecen en su pasaporte para establecer la identidad, la ciudadanía y el estado de la visa del titular del pasaporte.
Pero ahora el gobierno espera reemplazar el proceso de presentar el documento físico con el uso de esta nueva tecnología que a su vez podría reducir el tiempo de espera de los viajeros en los aeropuertos.
El procesamiento de pasajeros sin pasaportes utilizará la tecnología conocida como SmartGate o sistemas biométricos similares, que ya se están probando en algunos aeropuertos australianos y que usan tecnología de reconocimiento facial.
La tecnología también se utilizará para procesar a los viajeros que tienen pasaportes de otros países después de obtener sus datos cuando la persona ingresa a Australia por primera vez con su pasaporte.
Source: AAP
Sin embargo, la implementación de esta nueva tecnología no significa que un pasajero puede dejar su pasaporte en casa.
El pasaporte físico aún será necesario en algunas circunstancias, por ejemplo, si no se puede verificar la identidad o el estado de la visa de un pasajero o en caso de otros problemas, como razones de seguridad.
El pasaporte físico también se requerirá en los aeropuertos que no han implementado la nueva tecnología y en circunstancias en las que los viajeros se procesan manualmente.
El cambio se está introduciendo a través de una enmienda al Reglamento de Migración.
"Las enmiendas proporcionarán mayor eficiencia y seguridad en los aeropuertos relevantes, y darán efecto a la agenda de transformación digital, al permitir la confianza en la información digital existente en lugar de requerir la presentación de un documento físico", dijo el Ministro de Inmigración y Ciudadanía, David Coleman. La exposición explicativa.
Preocupaciones serias por la privacidad
Si bien el uso de esta tecnología no es obligatorio y los pasajeros podrán elegir libremente el procesamiento manual, existen inquietudes acerca de cómo la nueva tecnología podría afectar la privacidad.
En una presentación realizada en mayo de este año a un comité parlamentario, el Centro de los Derechos Humanos (HRLC) registró cuatro preocupaciones "sobresalientes" sobre la tecnología de reconocimiento facial.
El HRLC dijo que la capacidad del gobierno para vincular y compartir información personal conducirá a una "erosión muy sustancial de la privacidad".
El gobierno señala que la recopilación, el uso y la divulgación de información personal se realizan legalmente y agrega que la capacidad de recopilar, almacenar, usar y divulgar con precisión la identificación biométrica de todas las personas aumenta la integridad de los controles de identidad, seguridad e inmigración de las personas que entran y salen de Australia.
"El proceso sin contacto no tomará más información de la persona de la que sea razonablemente y necesaria para lograr el objetivo legítimo de confirmar la identidad de la persona", explicó el gobierno en un comunicado.
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