El primer ministro de Australia, Scott Morrison, reveló hoy que dos ciudadanos australianos murieron en los atentados con explosivos en Sri Lanka perpetrados durante las celebraciones cristianas del Domingo de Resurrección.
"Lamentamos profundamente estas muertes y extendemos nuestras profundas y más sinceras condolencias a la familia", dijo Morrison.
Esta noche se conoció que Manik Suriaaratchi y su hija de diez años Alexendria, exresidentes australianas, murieron durante la detonación de una bomba en una iglesia de Negombo.
Manik Suriyaaratchi and her 10-year-old daughter Alexendria were killed in the blast at the church in Negombo. Source: Facebook
La comunidad cingalesa australiana llora la muerte de esta madre y su hija.
"Ellas estaban allí, eran ciudadanas australianas y fueron para allá, unos tres o cuatro años atrás para cuidar de su madre", dijo Fahim Mawjood a SBS News durante una vigilia en Melbourne. El esposo de la mujer estaba aparcando el coche cuando ocurrió el atentado, relató Mawjood, al añadir que éste está ileso. Image La mujer fallecida era fundadora y directora gerente de Omega Global, una empresa de gerencia que facilitaba la entrada de marcas internacionales en nuevos países y lugares regionales. La empresa tenía oficinas en Colombo, Singapur y Melbourne. Asimismo dos australianas resultaron heridas, una mujer de poco más de 50 años y otra de unos veintitantos. El estado de salud de ambas es estable. Una de ellas fue atendida por heridas de esquirla y otra tiene una pierna rota. El total de heridos asciende a medio millar.
El primer ministro australiano recalcó que aún es muy pronto para saber con certeza si se ha verificado la situación de todos sus compatriotas.
Al menos 290 personas, incluyendo docenas de extranjeros, murieron y cerca de 500 resultaron heridas en ocho atentados explosivos contra tres iglesias que celebraban la misa de Pascua y cuatro hoteles de lujo en Sri Lanka, en la peor jornada de violencia en el país desde la guerra civil que terminó hace una década.
De acuerdo con el portavoz de la policía, Ruwan Gunasekera, ya asciende a 24 el número de personas arrestadas en relación con estos ataques.
La policía informó que el domingo también fue hallado un dispositivo explosivo artesanal en una vía de acceso al aeropuerto de Colombo, aunque la bomba improvisada fue desactivada por peritos de la Fuerza Aérea.
De momento los ataques no fueron reivindicados, señaló Gunasekera en una rueda de prensa.
El gobierno ordenó un toque de queda de duración indeterminada que entró en vigor el domingo y el bloqueo temporal de las redes sociales para evitar la difusión de informaciones falsas.
Seis deflagraciones se produjeron de mañana del domingo y otras dos por la tarde. Al menos en dos ataques hay relatos de testigos que hablan de un kamikaze como autor.
En tanto, tres policías murieron cuando otro suicida hizo estallar explosivos durante el allanamiento a una casa en busca de sospechosos, apuntaron las mismas fuentes.
-- "Torrente de sangre" --
"Fue un torrente de sangre", dijo N. A. Sumanapala, un comerciante al lado de la Iglesia de San Antonio en la capital de Colombo, atacada por la mañana. "Corrí adentro para ayudar. Me encontré al sacerdote que salía, cubierto de sangre".
En un video filmado en una de las iglesias atacadas se veían numerosos cuerpos descuartizados por el suelo, lleno de escombros y de sangre. La explosión fue tan fuerte que provocó el desprendimiento de parte del techo.
Las primeras explosiones ocurrieron en la iglesia de San Antonio, en la capital, y en la iglesia San Sebastián de Negombo.
En el hotel Shangri-La de Colombo un fotógrafo de la AFP constató importantes daños en un restaurante del segundo piso, con las ventanas destruidas y los cables colgando del techo.
También fue atacado el Cinnamon Grand Hotel, cercano a la residencia oficial del primer ministro.
Un ciudadano de Sri Lanka que se había registrado en el hotel la noche anterior bajo el nombre de Mohamed Azzam Mohamed hizo estallar una bomba en la fila de gente que aguardaba el buffet de Pascua del restaurante.
"Eran las 8 y media de la mañana. Había muchas familias", contó a la AFP un empleado. El kamikaze "Con un plato en la mano, se digirió al principio de la cola y se hizo estallar", agregó.
"Un gerente que recibía a los clientes forma parte de los que murieron instantáneamente [...] Era el caos total"
El ministro de Reformas Económicas, Harsha de Silva, dio cuenta en Twitter de "escenas horribles" en la iglesia de San Antonio y en dos de los hoteles atacados, que visitó.
"Vi fragmentos de cuerpos desperdigados por todas partes", tuiteó, añadiendo que había "muchas víctimas, incluyendo extranjeros".
El primer ministro calificó los ataques de "cobardes" e hizo un llamado por la unidad del país.
El arzobispo de Colombo, Malcom Ranjit, exhortó al gobierno de Sri Lanka a "castigar sin piedad" a los responsables, a través de una "investigación sólida imparcial".
El papa Francisco expresó dirigiéndose a los fieles reunidos en la Plaza San Pedro del Vaticano su "tristeza" y se declaró cerca de "todas las víctimas de una violencia tan cruel".
Sri Lanka (21 millones de habitantes) es un país mayoritariamente budista que cuenta con unos 1,2 millones de católicos. Junto al 70% de budistas, los hindúes representan un 12%, los musulmanes un 10% y los cristianos un 7%.
Megan Anderson, una residente de Melbourne, quien se encuentra de vacaciones junto a su esposo en Sri lanka, dijo al Daily Telegraph que muchos turistas de su país estaban conmocionados y ella asume que muchos de ellos estaban alojados en los hoteles que fueron blancos de los ataques.
"Todos los australianos están un poco asustados", dijo al diario. “El Cinnamon Grand, Shangri-La y el Kingston son todos hoteles de 5 estrellas en Colombo y definitivamente debe haber australianos en esos hoteles", recalcó.
AAP
Se trata del episodio más violento ocurrido en el país desde el fin de la guerra civil, hace una década. En un video filmado en una de las iglesias atacadas se veían numerosos cuerpos descuartizados por el suelo, lleno de escombros y de sangre. La explosión fue tan fuerte que provocó el desprendimiento de parte del techo.
Sri Lankan police investigate the scene after an explosion hit Shangri-La Hotel in Colombo, Sri Lanka. Source: AAP
Se produjeron ocho explosiones en esta turística isla, seis por la mañana y dos por la tarde. Al menos dos de ellas fueron obra de kamikazes, según testigos, pero el portavoz de la policía, Ruwan Gunasekera, que indicó que se llevaron a cabo tres arrestos, afirmó que no podía "confirmar si fueron ataques suicidas".
Al menos dos kamikazes participaron en la serie de explosiones en iglesias y hoteles que causaron 160 muertos este domingo en Sri Lanka, según la policía y testigos.
El primer ministro esrilanqués Ranil Wickremesinghe calificó los ataques de "cobardes" e hizo un llamado por la unidad del país.
El arzobispo de Colombo, Malcom Ranjit, exhortó al gobierno de Sri Lanka a "castigar sin piedad" a los responsables, a través de una "investigación sólida imparcial".
El papa Francisco expresó dirigiéndose a los fieles reunidos en la Plaza San Pedro del Vaticano su "tristeza" y se declaró cerca de "todas las víctimas de una violencia tan cruel".
Sri Lanka (21 millones de habitantes) es un país mayoritariamente budista que cuenta con unos 1,2 millones de católicos. Junto al 70% de budistas, los hindúes representan un 12%, los musulmanes un 10% y los cristianos un 7%.
No one has claimed responsibility for bomb blasts in Sri Lankan churches and hotels that killed 209. (AAP) Source: AAP
- Condena internacional -
Al menos 35 extranjeros figuran entre los fallecidos, incluyendo un portugués, un holandés y varios estadounidenses. Ciudadanos japoneses y británicos resultaron heridos.
"Aunque todavía están surgiendo muchos detalles de los ataques, podemos confirmar que varios ciudadanos estadounidenses están entre los muertos", dijo el secretario de Estado norteamericano Mike Pompeo.
Los cuerpos de 27 personas, presuntamente extranjeras según las autoridades, ingresaron en el hospital nacional de Colombo, según un responsable del ministerio de Relaciones Exteriores, Ravinatha Aryasinha.
De Irán a Reino Unido, las condolencias y los llamados a defender la libertad religiosa o a luchar contra el terrorismo se fueron multiplicando por todo el mundo. El presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó que su país está "dispuesto a ayudar", como había hecho antes la Unión Europea.
El jefe de la policía de Sri Lanka, Pujuth Jayasundara, alertó hace diez días en una nota a los oficiales de alto rango de que un grupo musulmán radical planeaba ataques suicidas contra "iglesias importantes así como la embajada india en Colombo".
El NTJ es un grupo musulmán radical de Sri Lanka que se dio a conocer el año pasado cuando fue implicado en actos vandálicos contra estatuas budistas. En Sri Lanka, los católicos son percibidos como una fuerza unificadora ya que tienen adeptos tanto entre los tamiles como entre los cingaleses.
Locals and police gather at the Secon church Batticalova central road in Colombo, Sri Lanka, 21 April 2019. Source: AAP
Sin embargo, algunos cristianos son mal vistos porque apoyan las investigaciones exteriores sobre los crímenes presuntamente cometidos por las fuerzas armadas contra los tamiles durante la guerra que culminó en 2009.
Según la Organización de Naciones Unidas, el conflicto de 1972 a 2009 dejó entre 80.000 y 100.000 muertos.
En 2017, la Alianza Nacional Evangélica Cristiana de Sri Lanka registró un centenar de incidentes contra los cristianos en la isla, según un informe del Departamento de Estado estadounidense. El año pasado, las autoridades decretaron 12 días de estado de emergencia para atajar unos disturbios contra los musulmanes en el centro del país.
Relatives of people killed in Church blasts mourn as they wait outside mortuary of a hospital in Colombo, Sri Lanka, Sunday, April 21, 2019. Source: AAP
Según la Organización de Naciones Unidas, el conflicto de 1972 a 2009 dejó entre 80.000 y 100.000 muertos.
En 2017, la Alianza Nacional Evangélica Cristiana de Sri Lanka registró un centenar de incidentes contra los cristianos en la isla, según un informe del Departamento de Estado estadounidense. El año pasado, las autoridades decretaron 12 días de estado de emergencia para atajar unos disturbios contra los musulmanes en el centro del país.
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© Agence France-Presse