Se espera que ese número aumente con el incremento de las temperaturas y los vientos secos que se prevé que alcancen su punto máximo el martes en algunos estados.
En Nueva Gales del Sur, se prevé que el peligro de incendio sea extremo en las cordilleras del sur y en Illawarra, mientras que en las regiones circundantes -incluidas Sydney, el Hunter, el ACT y el extremo de la costa sur- se prevé un grave peligro de incendio.
Se esperan fuertes vientos del oeste, que empujan los incendios hacia el este y ponen en peligro a las comunidades costeras.
El Servicio de Bomberos Rurales de Nueva Gales del Sur dijo que las comunidades propensas a los incendios forestales cerca de la Bahía de Batemans y Bega "deberían" trasladarse a grandes ciudades alejadas de los matorrales a las 8 de la mañana.
La prohibición total de incendios está en vigor en más de la mitad de los 21 distritos de incendios del estado, incluyendo Sídney, mientras que docenas de los casi 100 incendios del estado arden fuera de control.
En Victoria, es probable que se hayan perdido propiedades en el este del estado debido a que los incendios forestales fuera de control crecieron rápidamente durante la noche por los vientos y los rayos.
Los incendios han arrasado más de 200.000 hectáreas en el este de Gippsland en Victoria, según se estimó este martes temprano en la mañana.
Pero se espera que los daños sean mucho peores. El controlador de incidentes, Chris Eagle dice que los rayos en la región provocaron "cientos" de nuevos incendios de la noche a la mañana.
Hay mucho fuego, mucha actividad, es probable que haya un impacto en los residentes debido al tamaño - exactamente cuántos, dónde están, lo que significa que no sabemos todavía.
"El satélite tomó una imagen de algunas de las huellas de calor, tiene varias horas de haber sido tomada ahora, pero es probablemente cerca de un 60% más grande que ayer, mucho, mucho más grande y eso comienza justo al norte de Gelantipy".
Ayer lunes por la tarde, cuando las temperaturas se elevaron y los incendios comenzaron a crear sus propios sistemas meteorológicos, unos 1000 bomberos trabajaron combatiendo las llamas.
En el sur de Australia, el clima más fresco permitirá a los estresados equipos del servicio de bomberos del país tomar la delantera en una serie de incendios forestales.
Los mensajes de alerta y actuación siguen vigentes para los incendios en Kangaroo Island y en la Península de Eyre después de las catastróficas condiciones del lunes.
Pero hasta ahora no ha habido informes de pérdidas de propiedad en ninguno de los dos incendios y no ha habido más pérdidas en la zona de incendios de Adelaide Hills, donde el Servicio de Bomberos regional (CFS) sigue vigilando el gran incendio, que estalló hace 10 días.
Este lunes se produjeron más de 120 incendios forestales en Australia del Sur, lo que llevó al CFS a enviar más de 600 voluntarios y 150 camiones de bomberos al terreno.
En Tasmania, las autoridades temen que la propiedad haya sido dañada o destruida por dos incendios forestales distintos que se produjeron en un día de temperaturas récord.
Las llamas en Pelham en el valle del Alto Derwent y en el noreste del estado, cerca de la ciudad de Fingal, provocaron varias advertencias de emergencia ayer en la tarde.
Fueron degradados más tarde en la noche cuando un cambio fresco y la lluvia cruzaron la isla.
Las tripulaciones esperan realizar patrullas aéreas este martes para ver si se produjeron más incendios por los rayos secos de tormentas eléctricas.
Ayer fue probablemente el día de diciembre más caluroso de Hobart registrado, con el mercurio llegando a 40.8 ° C en la tarde.
