La Policía australiana puso en libertad a uno de los cuatro detenidos el sábado pasado en Sídney en un operativo para desbaratar un presunto plan para atentar contra un avión de pasajeros.
El detenido, un varón de 50 años, fue liberado anoche sin que se presentaran cargos en su contra, según un comunicado conjunto de la Policía Federal Australiana y la Policía del estado de Nueva Gales del Sur.
Los otros tres detenidos , sospechosos de tener "conexiones" con el Estado Islámico, siguen bajo custodia mientras continúa la investigación.
La Policía cree que los detenidos pretendían camuflar una bomba casera dentro de un triturador de carne e introducirla en un vuelo comercial aparentemente de Etihad Airways.
La aerolínea confirmó que está cooperando con la Policía en las investigaciones, según el canal 9 de la televisión local.
El experto en terrorismo, Greg Barton, considera que la sustancia que podría haber sido utilizada sería la llamada "madre de Satán", un potente gas utilizado en los atentados de Manchester de este año y en los de París en 2015.
La policía hizo las detenciones en redadas en cuatro suburbios de Sídney en una operación que inició tras recibir días antes información sobre el supuesto plan para atentar.
Australia elevó a alta su alerta terrorista en septiembre de 2014 y ha aprobado una serie de leyes antiterroristas para evitar que se cometan atentados en su territorio.
Desde entonces, el país ha sufrido cuatro acciones violentas y los cuerpos de seguridad han desbaratado 13 planes para perpetrar atentados y han detenido 70 personas en 31 intervenciones.
Fuente. Policía, ABC, agencias