Las vacunas de Pfizer y Oxford-AstraZeneca han sido "muy eficaces" para reducir las infecciones por coronavirus y las enfermedades graves entre las personas mayores en Gran Bretaña, con una reducción de más del 80% en las hospitalizaciones, según mostraron el lunes datos oficiales.
En los mayores de 80 años, una sola dosis de cualquiera de las dos vacunas tiene una eficacia superior al 80% en la prevención de la hospitalización unas tres o cuatro semanas después de la inyección, según un estudio del mundo de la Salud Pública de Inglaterra que ha recopilado datos desde enero.
El estudio se produce en un momento en el que Francia y Alemania se plantean revertir su negativa a autorizar la vacuna de AstraZeneca para los mayores de 65 años debido a las dudas sobre su eficacia.
Puntos destacados:
- Los datos oficiales revelan que las vacunas de Pfizer y Oxford-AstraZeneca han sido "muy eficaces" para reducir las infecciones por coronavirus y las enfermedades graves entre las personas mayores de Reino Unido.
- La vacuna de Pfizer ha ofrecido una protección contra el contagio de la enfermedad de entre el 57 y el 61 por ciento tras la primera dosis, mientras que la vacuna de AstraZeneca ofrece una protección de entre el 60 y el 73 por ciento, según el estudio.
- Australia comenzará a inocular la vacuna de AstraZeneca al grueso de su población.
El secretario de Sanidad británico, Matt Hancock, calificó el nuevo estudio de "muy buena noticia".
"Los datos detallados demuestran que la protección que se obtiene contra el contagio de COVID-19 35 días después de la primera inyección es incluso ligeramente mejor en el caso de la vacuna de Oxford que en el de Pfizer", añadió.
Ambas vacunas "son muy eficaces para reducir las infecciones por COVID-19 entre las personas mayores de 70 años", añadió el estudio.
La vacuna de Pfizer ha ofrecido una protección contra el contagio de la enfermedad de entre el 57 y el 61 por ciento tras la primera dosis, mientras que la vacuna de AstraZeneca ofrece una protección de entre el 60 y el 73 por ciento, según el estudio.
"Esto se suma a las crecientes pruebas que demuestran que las vacunas funcionan para reducir las infecciones y salvar vidas", dijo Mary Ramsay, jefa de inmunización del departamento británico de Salud Pública.
"Es importante recordar que la protección no es completa y que aún no sabemos en qué medida estas vacunas reducirán el riesgo de transmitir el COVID-19 a otras personas", añadió.
Gran Bretaña ha administrado la primera dosis de una de las dos vacunas a más de 20 millones de personas en el marco de un despliegue masivo que se considera vital para controlar uno de los peores brotes del mundo, que hasta ahora se ha cobrado casi 123.000 vidas.
Preguntado por el escepticismo de algunos países europeos sobre la eficacia de la vacuna de AstraZeneca, Jonathan Van-Tam, subdirector médico de Inglaterra, dijo que los resultados "reivindicaban" el enfoque británico.
"Creo que con el tiempo los datos que surjan del programa hablarán por sí mismos y otros países estarán sin duda muy interesados en ellos", dijo.