La policía de Nueva Gales del Sur confirmó que Jhoni Fernandes da Silva es un brasileño buscado en relación con el tráfico internacional de drogas y el cargamento que llegó a Australia en un barco argentino.
También se busca a una mujer, cuya identidad no ha sido revelada.
Se cree que ambos están implicados en el incidente que provocó la muerte del buzo Bruno Borges, de 31 años.
El valor de la cocaína incautada por la policía en Newcastle es de 20 millones de dólares australianos.
Puntos destacados:
- La Policía australiana ha hecho público,de forma inédita,el nombre y la foto de Jhoni Fernandes da Silva, de 32 años, buscado por la Brigada de Crimen Organizado de la Policía de Nueva Gales del Sur.
- El buzo brasileño Bruno Borges, de 31 años, se ahogó mientras intentaba recuperar la cocaína escondida en el casco del barco argentino Areti que atracó en Newcastle.
- El valor de la cocaína incautada por la policía en Newcastle es de 20 millones de dólares australianos.
La operación de envío de la droga a Australia salió mal después de que Bruno no consiguiera sacar la cocaína del casco del barco.
Su cuerpo fue descubierto en las aguas del puerto de Newcastle rodeado de paquetes de la droga, envueltos en plástico. La policía recuperó 54 kilos de cocaína, valorados en 20 millones de dólares australianos.
Bruno, según la policía australiana, fue abandonado cuando tuvo problemas con su equipo de buceopor otros miembros de la banda que huyernon dejándolo atrás "para que muriera".
La policía brasileña ha confirmado la participación de dos brasileños en la operación.
"Durante la investigación, se identificaron dos capixabas(del estado brasileño de Espíritu Santo)en esta práctica delictiva, uno de ellos era el encargado de sacar la droga del casco del barco cuando tuvo un problema con su aparato de buceo y llegó a la muerte", dijo el delegado de la Policía Federal de Brasil, Víctor Batista al portal UOL.
Comienza la búsqueda del brasileño Jhoni Fernandes da Silva
La Policía australiana publicó la semana pasada las imágenes de las cámaras de seguridad que muestran a un hombre y una mujer entrando en un edificio.
Según los investigadores australianos, el hombre y la mujer "podrían ayudar en la investigación del cargamento de droga que salió mal y provocó la muerte de otro hombre [el brasileño Bruno Borges] en el puerto de Newcastle el 9 de mayo".
La mujer fue descrita como delgada, de unos 150-160 cm de altura, con piel bronceada y pelo rubio o gris.
La policía describe a Jhoni Fernandes da Silva como una persona de unos 180 cm de altura, de complexión atlética y musculosa, cabeza afeitada, ojos marrones y barba sin afeitar.
Redada antidroga de la Policía de Nueva Gales del Sur
El detective superintendente Robert Critchlow dijo que la pareja podría haber estado en Newcastle entre el 1 y el 11 de mayo, y advirtió que el brasileño es presuntamente peligroso.
Se aconseja a cualquier persona que vea a Jhoni Fernandes da Silva, o que tenga información sobre su paradero, que no se acerque a él, y que llame inmediatamente a la línea de emergencia en Australia, Triple Cero (000).
En una entrevista con la SBS en portugués, Leonardo Rabelo, Jefe de Sector del Consulado de Brasil en Sidney, dijo que la policía de Nueva Gales del Sur no informó a la legación diplomática sobre la orden de registro, pero que sabía por la prensa brasileña, que había un segundo brasileño involucrado que estaría fugado.
Hasta ahora sólo se ha producido una detención: un operador de veleros de lujo de Queensland, James "Jimmy" Blee. El hombre fue arrestado por su presunta participación en esta operacióny acusado del delito federal de importación de una gran cantidad comercial de cocaína.
Los detectives de la Brigada contra el Crimen Organizado de Nueva Gales del Sur están investigando después de que un buzo muriera tras ser encontrado inconsciente cerca de 50 kg de cocaína en la orilla de Newcastle.
El consulado de Sidney en Australia se pone en contacto con la familia del joven submarinista asesinado
"El Consulado está en contacto con la familia del buzo Bruno Borges y siguiendo el protocolo habitual de confirmar la identidad del ciudadano brasileño y poner a la familia en contacto con las autoridades locales, en este caso la policía de Nueva Gales del Sur", confirmó Leonardo Rabelo, del Consulado de Brasil en Sidney.
Según él, el cuerpo del buzo sigue en Newcastle, pero la policía ha informado al consulado de que el cuerpo será sometido a la autopsia y al análisis del médico forense.
La Embajada de Brasil en Australia también confirmó a SBS en portugués que está siguiendo el caso y que ya ha hablado, incluso con la familia. Tanto el Consulado como la Embajada están en contacto para prestar toda la asistencia consular posible a la familia.
Un padre reacciona a la noticia de la muerte de su hijo en Australia
El pescador Natanael Benedito Martins, padre de Bruno, el buzo asesinado en Australia, habló con el periodista Vinicius Zagoto, de la Gazeta do Espírito Santo, sobre la posible conexión de su hijo con el mundo del tráfico.
Natanael, de 60 años, dijo que su hijo solía visitarlos de vez en cuando, pero que hacía tres o cuatro meses que no veía a su familia en Barra Nova, en la costa de São Mateus, en Espírito Santo.
El hijo siempre decía que trabajaba en São Paulo, Río de Janeiro y Vitória, como buzo profesional y pintor.
Según su padre, Bruno envió fotos a su madre avisando de que estaba de viaje y luego no volvió a ponerse en contacto.
"Si hubiéramos sabido de esta conexión(con traficantes) nunca habría estado allí haciendo esto", dijo el padre.
