Autoridades estadounidenses han dicho a los jueces británicos que si aceptan extraditar a Julian Assange por cargos de espionaje, el fundador de WikiLeaks podría cumplir cualquier sentencia de prisión estadounidense que reciba en su natal Australia.
Los fiscales estadounidenses han acusado a Assange de 17 cargos de espionaje y un cargo de uso indebido de computadoras por la publicación de WikiLeaks de miles de documentos militares y diplomáticos filtrados.
Los cargos conllevan una sentencia máxima de 175 años de prisión, aunque se dice que "la sentencia más larga impuesta por este delito es de 63 meses".
Puntos destacados:
- Autoridades estadounidenses aseguran que si el fundador de WikiLeaks es declarado culpable, éste podría cumplir su condena en su natal Australia.
- El abogado del fundador de Wikileaks dijo en una comunicación escrita que Australia aún no ha aceptado tomar a Assange si es condenado.
- Varias docenas de manifestantes a favor de Assange realizaron una bulliciosa manifestación frente a los Tribunales Reales de Justicia, acusando a la fiscalía de estar motivada políticamente.
Ante la justicia británica que examina su demanda de extradición de Julian Assange, Estados Unidos puso el miércoles en entredicho el riesgo de suicidio y dio garantías sobre el tratamiento que recibirá el fundador de WikiLeaks si se le entrega.
En esta audiencia, que está prevista que se prolongue hasta el jueves, Estados Unidos espera convencer al Alto Tribunal de Londres de anular la decisión de enero de la jueza Vanessa Baraitser. La magistrada había rechazado la demanda de extradición basándose en el riesgo de que Assange se suicidara si era encarcelado en un centro estadounidense.
El miércoles, el abogado que representa al gobierno estadounidense, James Lewis, aseguró que Assange no presentaba "ningún antecedente de enfermedad mental grave y duradera" y afirmó que incluso los expertos de su defensa sólo lo encontraban "moderadamente deprimido".
Según él, el fundador de WikiLeaks tenía "todas las razones de exagerar sus síntomas" y advirtió sobre una decisión que se basaría en las predicciones hechas en "una bola de cristal" sobre su suerte en caso de extradición.
Aunque los cargos conllevan una sentencia máxima de 175 años de prisión, Lewis dijo que "la sentencia más larga impuesta por este delito es de 63 meses".
Lewis dijo que las autoridades estadounidenses han prometido que Assange no será detenido antes del juicio en una prisión de máxima seguridad, ni sometido a estrictas condiciones de aislamiento, y que si lo declaraban culpable se le permitiría cumplir su condena en Australia.
Lewis dijo que las garantías "son vinculantes para Estados Unidos".
Estados Unidos también señaló que un testigo clave de la defensa, el neuropsiquiatra Michael Kopelman, engañó al juez anterior al omitir mencionar que Stella Moris, miembro del equipo legal de WikiLeaks, también era pareja de Assange y tenía dos hijos con él.
Lewis dijo que la información era "un factor muy relevante para la cuestión de la probabilidad de suicidio".
El abogado de Assange, Edward Fitzgerald, acusó a los abogados estadounidenses de buscar "minimizar la gravedad del trastorno mental y el riesgo de suicidio de Assange".
Fitzgerald dijo en una comunicación escrita que Australia aún no ha aceptado tomar a Assange si es condenado.
Incluso si Australia estuviera de acuerdo, Fitzgerald dijo que el proceso legal estadounidense podría llevar una década, "durante la cual Assange permanecerá detenido en extremo aislamiento en una prisión estadounidense".Se esperaba que Assange, quien está detenido en la prisión de alta seguridad de Belmarsh en Londres, asistiera a la audiencia de dos días por enlace de video, pero Fitzgerald dijo que Assange había recibido una alta dosis de medicación y "no se siente con capacidad para asistir".
Stella Morris appears outside the High Court in London, 27 October, 2021. Source: AAP, Press Association
Sin embargo, Assange apareció más tarde por momentos en el enlace de video sentado en una mesa en una sala de la prisión con una mascarilla negra.
Desde que WikiLeaks comenzó a publicar documentos clasificados hace más de una década, Assange se ha convertido en una figura explosiva.
Algunos lo ven como un peligroso divulgador de secretos que puso en peligro la vida de informantes y otros que ayudaron a Estados Unidos en zonas de guerra.
Otros dicen que WikiLeaks arrojó luz sobre la malversación oficial que a los gobiernos les gustaría mantener en secreto.
Varias docenas de manifestantes a favor de Assange realizaron una bulliciosa manifestación frente a los Tribunales Reales de Justicia el miércoles, calificando a la fiscalía como motivada políticamente.
Los partidarios de WikiLeaks dicen que el testimonio de testigos durante la audiencia de extradición de que Assange fue espiado mientras estaba en la embajada de Ecuador en Londres por una empresa de seguridad española a instancias de la CIA, y que incluso se habló de secuestrarlo o matarlo, socava las afirmaciones de Estados Unidos de que será tratado de manera justa.