Los comentarios del abogado de Pell, Robert Richter, vertidos el miércoles fueron los que más polvareda generaron en el caso contra el cardenal George Pell por abusos sexuales a menores, dado que en su defensa intentó minimizar la gravedad de los crímenes que se le atribuyen al prelado de 77 años.
Fue la frase “no es más que un simple caso de penetración sexual convencional en el que el niño no participa voluntaria ni activamente", la que tocó la sensibilidad de muchos, especialmente un miembro de nuestra comunidad hispana que asegura haber sido toqueteado por un sacerdote.
El defensor también adujo que el incidente solo duró unos minutos, no fue premeditado y fue producto de un impulso, al intentar calificarlo en la escala más baja de los delitos, a lo que el juez le contestó que se trató de una "ofensa cruel y descarada.
“Yo fui indecentemente tocado por un sacerdote cuando buscaba consuelo porque mi padre estaba moribundo. Era un adolescente que respetaba a la iglesia. Probablemente duró menos de 30 segundos, pero las consecuencias duraron toda una vida. Un hombre que se supone representaba a Jesucristo en la Tierra, un hombre que se supone tenía que ayudarme en un momento de crisis hizo totalmente lo opuesto. Así que estoy horrorizado por aquellos que defienden a George Pell, incluyendo a su abogado Robert Richter, quien describió uno de los delitos de Pell como ‘simple una penetración sexual de vainilla’. Asqueroso. Tener a un exprimer ministro que apoye a un pederasta me horroriza también”, dijo F.
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Este miembro de nuestra comunidad, que por respeto a su intimidad lo identificaremos como F., se refería a las diez referencias de carácter presentadas a favor de Pell, entre ellas la del exprimer ministro liberal John Howard, quien a pesar de conocer la condena habló en favor de Pell.
Pero F. es uno de tantos hispanos en Australia que han reaccionado a la noticia de la detención del cardenal Pell y de los detalles que se emanan en el juicio al extesorero del Vaticano.
El cardenal australiano George Pell, quien fuera el número tres del Vaticano, fue hallado culpable de abusos sexuales a dos menores en la década de 1990. Hasta el miércoles gozaba de libertad condicional, pero en la vista que antecede a la sentencia, el juez Peter Kidd del Tribunal del Condado de Victoria ordenó su detención a la espera de su condena el próximo 13 de marzo.
Tras el levantamiento de la orden judicial que impedía a la prensa informar de lo sucedido, se pudieron conocer algunos detalles del proceso, especialmente referido a los alegatos vertidos ayer tanto por la defensa como la acusación, además de las acotaciones del juez Kidd.
Un jurado determinó el 11 de diciembre pasado que Pell es culpable de cinco cargos de abusos sexuales a menores, entre ellos el de penetración oral de un menor de 16 años.
"El prisionero no ha mostrado ningún remordimiento ni conocimiento de su ofensa", dijo el miércoles el fiscal Mark Gibson ante el juez Peter Kidd.
“Tiene el derecho a defenderse pero no a quedar absuelto”, decía Gisella Z, mientras Ilma V. recalcaba “lo encontraron culpable por unanimidad” y Miriam V. señalaba “es la consecuencia de sus actos.
“El equipo de los abogados de Pell valió alrededor $50K por día, según los medios de comunicación. El Cardenal Pell creyó un sistema de compensación que se llama el ‘Melbourne Response’. El sistema pagaba un máximo de $50K a cada víctima del abuso a manos de los sacerdotes católicos. En total. Y con un acuerdo de silencio de cada víctima”, criticaba John Lpt.
“Cuán importante es vivir en un país donde la constitución es ‘LAICA ‘ , donde sea cual sea tu credo, tengas libertad o condena por tus culpas o delitos cometidos! Cuántos países en Latinoamérica hasta ahora no respetan esto y tendrán ocultos estos delitos, por el poder que tienen en los gobiernos!.. Que se pudra en el infierno!! 😡. “, señaló Fernando F.
El cardenal Pell espera entre rejas su sentencia, que será emitida el 13 de marzo, pero sus abogados ya adelantaron que apelarán.