Este artículo contiene referencias a la violencia doméstica y detalles que pueden herir la sensibilidad de los lectores.
Las personas que testificaron en la investigación sobre la muerte de Hannah Clarke y sus tres hijos recordaron los gritos escalofriantes de esta madre, así como las súplicas para salvar a sus hijos. Hannah, según los relatos, luchó contra su exmarido después de que él vertió combustible en su coche y lo encendió.
Clarke y sus tres hijos fueron rociados con gasolina y quemados vivos por Rowan Baxter en Brisbane el 19 de febrero de 2020.
Hannah y sus hijos Aaliyah, de seis años, Laianah, de cuatro, y Trey, de tres, acababan de salir de la casa de los padres de la mujer en Camp Hill sobre las 8.30 de la mañana cuando Baxter se subió al asiento del copiloto del coche armado con un cuchillo y un bidón de gasolina.
Puntos destacados:
- Hannah Clarke y sus tres hijos Aaliyah, de seis años, Laianah, de cuatro, y Trey, de tres fueron rociados con gasolina y quemados vivos por Rowan Baxter en Brisbane el 19 de febrero de 2020.
- Baxter se suicidó con el cuchillo, mientras que Clarke murió en el hospital esa misma tarde.
- El padre de Clarke, Lloyd, dijo fuera del tribunal que espera que la investigación determine cómo el sistema defraudó a su hija y a sus nietos.
Antes de morir, Clarke dijo a los testigos que Baxter le indicó que condujera, pero se detuvo frente a una casa en la que el fisioterapeuta Michael Zemek estaba lavando su coche, según los relatos de los hechos expuestos ante el grupo que investiga los hechos en Brisbane.
Zemek dijo que primero escuchó un grito histérico, antes de que Clarke gritara: "Llama a la policía, llama a la policía. Está intentando matarme. Me ha echado gasolina".
El fisioterapeuta dijo que no pudo ver ni oír a los niños, pero Baxter sostenía a Clarke con ambos brazos como si tratara de mantenerla en el coche.Baxter no parecía agresivo, pero sostenía a Clarke con una mirada resignada, como si no la dejara escapar, agregó.
The funeral for Hannah Clarke and her three children Aaliyah, Laianah and Trey, murdered in a domestic violence incident, Feb 19, 2020. Source: AAP Image/Dan Peled
"Cuando me acerqué a la ventanilla (del coche), simplemente explotó", detalló Zemek.
Zemek utilizó una manguera para verter agua sobre Clarke una vez que estaba fuera del coche, diciéndole que rodara sobre la hierba para apagar las llamas. El fisioterapeuta recordó que le parecía que Clarke era "increíblemente fuerte ante lo que había pasado".
Samantha Covey detuvo su vehículo al ver el humo y roció con una manguera a Clarke, que tenía graves quemaduras en todas partes excepto en los pies, intentando mantenerla calmada y consciente.
Las primeras palabras que dijo la mujer herida fueron: "Mis hijos, que alguien traiga a mis hijos", dijo Covey en la investigación.
Clarke dijo que no podía creer que Baxter hubiera "hecho esto".
"Tengo un maldito DVO (orden de alejamiento por violencia doméstica)", le dijo a Covey.
Clarke dijo que Baxter había arrojado un encendedor después de que ella detuviera el coche, que trató de luchar contra él, incluso rasgando su camisa.
"No pude detenerle"
Kerry Fernández, que vivía cerca, habló de haber escuchado un escalofriante "grito de madre en pánico" como nada que hubiera oído antes.
Mientras llamaba por teléfono a los servicios de emergencia, vio cómo el coche de Clarke se detenía antes de estallar en llamas.
Mientras Fernández utilizaba un extintor para apagar las llamas del coche, Baxter, que estaba muy quemado, el agresor saltó delante de ella y se metió en el coche.Sólo después los testigos se dieron cuenta de que había salido con un cuchillo.
Hannah Clarke, Rowan Baxter and their three children Laianah, Aaliyah and Trey. Source: Facebook
Fernández dijo que se sintió intimidada, ya que parecía que el hombre musculoso de mirada "inexpresiva" intentaba impedir que apagara el fuego.
Estaba "gruñendo o algo así" sin que le salieran palabras.
"Me pareció que estaba casi vigilando el coche", precisó Fernández.
Baxter se suicidó con el cuchillo, mientras que Clarke murió en el hospital esa misma tarde.
En la investigación, que durará dos semanas, la juez de instrucción Jane Bentley escuchará a los servicios de emergencia, a los amigos de Clarke y de Baxter y a los servicios de violencia doméstica.
El padre de Clarke, Lloyd, dijo fuera del tribunal que espera que la investigación determine cómo el sistema defraudó a su hija y a sus nietos.
"Para que puedan poner en marcha nuevos procedimientos... para que la gente no tenga que pasar por algo tan terrible", dijo.
Si usted o alguien que conoce se ve afectado por una agresión sexual o por la violencia familiar o doméstica, llame al 1800RESPECT al 1800 737 732 o visite 1800RESPECT.org.au. En caso de emergencia, llame al 000.