El anuncio de las ayudas financieras para los trabajadores, contratistas y empresas por ele lrgo confinamiento de Sídney por un brote de COVID-19 ha desatado una guerra entre los gobiernos de Victoria y el Federal por el supuesto doble rasero respecto a los rescates económicos dados a un estado dirigido por el opositor Partido Laborista y el de NSW, dirigido por la coalición oficialista.
El ministro de Apoyo a la Industria y Recuperación de Victoria, Martin Pakula,acusó al gobierno de Morrison de ofrecer un "apoyo dorado" a Nueva Gales del Sur, mientras que "castigó" a las empresas y trabajadores de Victoria durante el último confinamiento de estado en el que ni siquiera dio señales de que aumentaría los pagos máximos disponibles para los trabajadores de $ 500 a $ 600 semanales si la cuarentena metropolitana era extendida.
Loss trabajadores de Nueva Gales del Sur recibirán un aumento de su ayuda a los ingresos de 500 a 600 dólares semanales, mientras que a los propietarios de empresas se les ofrecerá un aumento de la liquidez de hasta 10.000 dólares a partir de la cuarta semana de confinamiento, en virtud de un paquete financiado a partes iguales por el gobierno federal y el de Nueva Gales del Sur, que pondrá a prueba un nuevo modelo para los cierres en otros estados y territorios.
Pero el plan no fue bien recibido en Victoria, donde durante el cierre de mayo y junio las relaciones se agriaron después de que miembros del gobierno federal informaran a los periodistas de su opinión de que los gobiernos estatales deberían asumir la responsabilidad principal del coste de los cierres, recordó el Sydney Morning Herald,
Tras la primera semana de cierre en Victoria, la Commonwealth financió un pago por catástrofe de hasta 500 dólares para los que habían perdido el trabajo, aunque se impuso una prueba de activos que ha sido eximida en Nueva Gales del Sur, según una crisis en la que el Gobierno de Camberra asegura que Victoria se negó a financiar el 50 por ciento del rescate.
Puntos destacados:
- Sídney, la ciudad más poblada de Australia que afronta un brote con la altamente contagiosa variante delta, fue confinada el 26 de junio hasta por lo menos el 30 de julio, tras anunciarse el miércoles la segunda extensión de esta cuarentena.
- Las ayudas anunciadas el martes por el Gobierno australiano para Nueva Gales del Sur, cuya capital es Sídney, ha generado los reclamos de Victoria que considera que se da un trato diferenciado.
- Los pagos de apoyo proporcionados a Nueva Gales del Sur, que afronta un confinamiento prolongado, actuarían como una "plantilla" para otros estados que se encuentran en una situación similar.
Por su lado, el primer ministro australiano, Scott Morrison, señaló que el Gobierno de la Coalición estaba “poniendo tres cuartos de mil millones de dólares cada semana en Victoria mientras ellos pasaban por (su cierre de dos semanas)", dijo Morrison al canal 9, al insistir en que el anuncio para NSW corresponde “exactamente lo que cualquier otro estado y territorio obtendría en una semana cuatro de bloqueo".
Por su lado, el jefe de la oficina del Tesoro australiano,, Josh Frydenberg, cuyo escaño está en Victoria, atacó al gobierno estatal, liderado por el laborista Daniel Andrews, por hacer "política mezquina" en medio de la crisis del COVID-19.
"Es muy decepcionante que el premier decida jugar a la política mezquina", dijo Frydenberg al asegurar que “"Victoria recibió exactamente lo mismo que Nueva Gales del Sur durante las dos primeras semanas del programa".
"No hay nada que objetar al respecto. Ese fue el alcance del confinamiento de Victoria: dos semanas", mientras que el de “Nueva Gales del Sur es más largo que el de Victoria".
Los pagos de apoyo proporcionados a Nueva Gales del Sur, que afronta un confinamiento prolongado, actuarían como una "plantilla" para otros estados que se encuentran en una situación similar, dijo Frydenberg.
