Las autoridades del estado de Victoria, el segundo más poblado de Australia, pidió a una veintena de residentes de un edificio de viviendas en Richmond que se autoaislen durante 14 días por estar relacionados con un caso positivo, según anunció el domingo.
También reportaron cuatro casos locales de COVID-19 que están vinculados a brotes actuales y se registraron en cuarentena durante su período infeccioso, lo que da señales alentadoras de que este estado, que confinó rápidamente a sus pobladores, tiene bajo control el brote con la variante Delta.
Puntos destacados:
- Los cuatros casos del domingo están relacionados con los brotes actuales del estado y todos estuvieron en cuarentena durante su periodo infeccioso.
- una veintena de residentes de un edificio de viviendas en Richmond que se autoaislen durante 14 días,
- La orden de permanecer en casa afecta a unos 20 residentes del edificio.
- Sólo diez de las 204 personas que dieron positivo a la COVID-19 en Victoria el mes pasado estaban completamente vacunadas, y ninguna de ellas estaba en el hospital.
Las autoridades sanitarias afirman que Victoria administró 15.841 dosis de vacunas en las 24 horas transcurridas hasta el sábado por la noche y procesó 25.779 pruebas del virus.
Las cifras del domingo siguen a dos casos notificados el sábado, uno de ellos en cuarentena durante su periodo de contagio y el otro, un colega de un trabajador del centro de pruebas de Melbourne en el hipódromo de Moonee Valley que estuvo brevemente en la comunidad antes de aislarse.
Las autoridades siguen investigando este caso.
En Victoria hay ocho personas hospitalizadas, tres de ellas en la UCI y una con respirador artificial.
Sabemos que esta vacuna funciona
El director de salud del estado, Brett Sutton, dijo que sólo 10 de las 204 personas que dieron positivo a la COVID-19 en Victoria el mes pasado estaban completamente vacunadas, y ninguna de ellas estaba en el hospital.
De los vacunados, todos estaban completamente sin síntomas o tenían síntomas leves.
"Sabemos que esta vacuna funciona. Sabemos que no todo el mundo es todavía elegible, pero para enfatizar, para aquellos que actualmente son elegibles... realmente es una protección adicional para salir y obtener una vacuna y ciertamente para completar ese calendario de vacunas”.
"Sabemos que reduce el riesgo de contraer COVID-19, y especialmente de enfermar de COVID-19. Son pruebas cada vez más convincentes de todo el mundo, donde se han administrado cientos de millones, de hecho, miles de millones de vacunas en todo el mundo", recalcó Sutton.
La cadena de contagios de los casos del sábado
El ministro de Sanidad, Martin Foley, dijo el sábado que uno de los casos, un controlador de tráfico compartió ascensor tras terminar el trabajo con un compañero que dio positivo a la COVID-19 esta semana.
"Él (el segundo controlador de tráfico) fue aislado tan pronto como se identificó como contacto cercano y no tuvo mucho tiempo en la comunidad", dijo.
El 28 de julio visitó el centro comercial Devon Plaza de Doncaster, por lo que cualquier persona que estuviera allí entre las 10.20 y las 11.25 horas debería aislarse y hacerse las pruebas, dijo.
Las autoridades siguen investigando cómo contrajo el virus el primer trabajador de Moonee Valley.
Los resultados iniciales de las pruebas genómicas han relacionado el caso con el brote del complejo de apartamentos Ariele de Maribyrnong, provocado por una cuadrilla de trabajadores de mudanzas de Nueva Gales del Sur.
Sin embargo, hasta el sábado no se había establecido el origen de la infección del hombre de Frankston con la cepa Delta.
Éste visitó a su pareja en un edificio de apartamentos de Newport mientras estaba infectado y es un contacto cercano de esta persona el segundo caso positivo registrado el sábado.
Número de vacunados
Mientras tanto, el hecho de que Victoria cuente ya con más de un millón de residentes totalmente vacunados supone un ligero cambio en la implantación de las dosis de Pfizer en sus clínicas estatales.
A partir del lunes, todas las personas que reciban una primera dosis de Pfizer esperarán seis semanas -y no tres- para su segunda dosis.
El retraso de la segunda dosis es la misma estrategia que se está utilizando en Sydney para proteger más rápidamente a la población y que también se ha hecho en el Reino Unido y Canadá.
Las clínicas de medicina general gestionadas por la Commonwealth seguirán administrando las segundas dosis de Pfizer tres semanas después de la primera.
Victoria vive bajo restricciones relajadas desde que salió de su quinto bloqueo, aunque todavía no se permiten las reuniones privadas y se aplica el uso estricto de mascarillas.