Un sistema de baja presión sobre el sureste del mar de Tasmania está empujando vientos sumamente fríos y huracanados hacia Nueva Gales del Sur (NSW) y Victoria, causando nevadas en los pueblos de Blayney, Bathurst, Oberon y al oeste de Lithgow, en Central Tablelands, y en las zonas montañosas del sur de NSW.
Las bajas temperaturas trajeron nieve a Canberra, capital australiana, NSW y la región alpina de Victoria, donde los edificios y objetos al aire libre en localidades como Falls Creek, han quedado casi enterrados en la nieve.
La nieve también está cayendo en Thredbo.
Durante dos días, el centro de esquí de NSW ha recibido casi medio metro de nieve, dando señales de que la temporada de esquí podría comenzar antes de lo previsto.
Lo mismo aplica al centro de esquí de Perisher (NSW) donde las temperaturas bajaron a -8° y se registró 30 centímetros de nieve.
La Oficina de Meteorología ha confirmado la continuación de fuertes vientos y bajas temperaturas para NSW, Victoria y ACT durante el resto de este miércoles (1 de junio).
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