El gobierno australiano aseguró 300 mil dosis de una nueva píldora antiviral que ha mostrado signos de reducir las muertes y hospitalizaciones por COVID-19, en alrededor del 50 por ciento.
El Molnupiravir, desarrollado y producido por el gigante farmacéutico estadounidense Merck Sharp & Dohme, se encuentra actualmente en ensayos clínicos en etapa avanzada.
"Las vacunas y los nuevos tratamientos como éste impulsarán nuestro Plan Nacional para reabrir Australia de forma segura y mantener Australia abierta de forma segura", dijo el primer ministro Scott Morrison.
Puntos destacados:
- Se trata de un fármaco para reducir las muertes y hospitalizaciones por COVID-19, el cual se encuentra actualmente en ensayos clínicos en etapa avanzada.
- Otros tratamientos de COVID-19 como Sotrovimab y Remdesivir ya están siendo utilizados por profesionales médicos para pacientes con COVID-19.
- Se espera que el Molnupiravir sea un tratamiento de primera línea para pacientes adultos con coronavirus con síntomas leves a moderados.
"Si bien nuestra tasa de vacunación continúa aumentando, hemos estado invirtiendo y monitoreando de cerca la investigación sobre los tratamientos de COVID-19 y estamos asegurando el suministro de tratamientos prometedores", declaró Morrison.
El Molnupiravir se ha desarrollado como tratamiento de primera línea para pacientes adultos con coronavirus con síntomas leves a moderados.
La compañía farmacéutica anunció anteriormente los resultados del ensayo que mostraban que el tratamiento redujo las hospitalizaciones y muertes en alrededor del 50 por ciento.
Si la Administración de Productos Terapéuticos de Australia (TGA, por sus siglas en inglés) lo aprueba, se espera que el medicamento esté disponible a principios de 2022.
Nuevos tratamientos para proporcionar ayuda más fácilmente
Otros tratamientos de COVID-19 como Sotrovimab y Remdesivir ya están siendo utilizados por profesionales médicos para pacientes con COVID-19.
El tratamiento de Molnupiravir consiste en cápsulas que los pacientes adultos toman dos veces al día durante cinco días.
El medicamento no requiere refrigeración, lo que permite al paciente utilizarlo directamente o en lugares de alto riesgo.
"Una pastilla oral es obviamente un medio mucho más fácil de ayudar a la gente", resaltó el ministro de Salud, Greg Hunt, a los periodistas el lunes.
"Estos (medicamentos) estarían disponibles según las necesidades en todo el país".
Mientras tanto, Australia ha recibido 15 mil dosis adicionales del tratamiento con anticuerpos Sotrovimab, que se utiliza para detener la replicación del virus.
Se espera que la reserva nacional del fármaco, administrada por infusión intravenosa dentro de los cinco días de que los pacientes desarrollan los síntomas, supere las 30 mil dosis este año.
Se ha demostrado que éste reduce la hospitalización o la muerte en pacientes con infecciones leves o moderadas y que tienen un alto riesgo de enfermedad grave.
"Ayuda a activar el cuerpo y su sistema inmunológico para luchar contra el COVID", detalló el ministro de Salud.
"En muchos casos, esto significará la diferencia entre hospitalización o no hospitalización, UCI o no UCI, y en algunos casos evitará la pérdida de vidas".
Opciones de tratamiento necesarias para responder a diferentes variantes
Si bien las vacunas siguen siendo el primer puerto de escala para vencer al coronavirus, el epidemiólogo de la Universidad de Australia del Sur, Adrian Esterman, ha destacado la importancia de encontrar nuevos tratamientos.
"No se ha puesto mucho énfasis en la investigación del tratamiento desde el comienzo de esta pandemia", resaltó el académico.
"Incluso con el 100 por ciento de la población completamente vacunada, todavía habrá virus circulando porque ninguna de las vacunas es 100 por ciento efectiva contra la transmisión".
Al mismo tiempo, garantizar que el mundo esté vacunado reducirá drásticamente la gravedad de la enfermedad y la necesidad de tratamiento.
"Aún es temprano para los tratamientos y todavía estamos esperando que se completen muchos de los ensayos para ver qué otros tratamientos son potencialmente útiles contra el coronavirus", añadió el profesor Esterman.
"Durante los próximos años, podemos ver mejoras continuas en la tecnología de vacunas, en particular para manejar estas diferentes variantes, y esto podría ser una batalla constante entre nuevas variantes de vacunas".