El informe final de la Comisión Real sobre la Calidad y la Seguridad de los Cuidados a las Personas Mayore señaló que al menos un tercio de las personas que acceden a los servicios de atención residencial y a domicilio han recibido una atención deficiente.
El informe, que presenta 148 recomendaciones, concluye que uno de cada tres australianos en el sistema de atención a la tercera edad ha experimentado una atención deficiente y, sorprendentemente, casi uno de cada cinco personas en residencias de ancianos ha sido agredido.
Es necesario un cambio filosófico que sitúe a las personas atendidas en el centro de la regulación de la calidad y la seguridad, según el informe publicado el lunes y al que el gobierno de Scott Morrison respondió con una financiación adicional de 452 millones de dólares para abordar las prioridades inmediatas identificadas por la investigación de dos años.
El gobierno de Morrison también está estudiando la posibilidad de establecer un nuevo impuesto sobre la atención a la tercera edad para ayudar a financiar la enorme reforma necesaria tras las conclusiones de la Comisión Real.
Puntos destacados:
- El informe estimó que las decisiones colectivas de los sucesivos gobiernos habían recortado más de 9.800 millones del presupuesto para la atención a las personas mayores en 2018-19.
- El informe recomendó que los centros estén sujetos a unas normas mínimas de calidad y seguridad para el tiempo del personal en la atención residencial a la tercera edad.
- El gobierno de Scott Morrison respondió con una financiación adicional de 452 millones de dólares para abordar las prioridades inmediatas identificadas por la investigación de dos años.
La primera recomendación se refiera a la creación de una ley sobre el cuidado de ancianos, que deberá implementarse antes de julio de 2023, mientras otras incluyen leyes para proteger los derechos de lso ancianos e incrementar los derechos de los organismos reguladores.
Además de las 148 recomendaciones, los comisionados hicieron las suyas por separado.
El comisionado Tony Pagone, QC, recomendó la creación de una comisión de atención a la tercera edad independiente como entidad corporativa de la Commonwealth para mantener el sistema de atención a la tercera edad y supervisar la calidad y la seguridad.
Pagone también recomendó la creación de una autoridad encargada de fijar los precios de la asistencia a las personas mayores y de un consejo consultivo de asistencia a las personas mayores.
Por su lado, la comisionada Lynelle Briggs recomendó que siempre haya un miembro del gabinete responsable de la atención a las personas mayores y dijo que el Departamento de Salud debería pasar a llamarse Departamento de Salud y Atención a las Personas Mayores.
Informe sobre el sector de cuidados a la tercera edad Source: Getty
Principales recomendaciones
Financiación
La Comisión recomienda la revisión de la Ley de Asistencia a las Personas Mayores de 1997, que, según la comisión, fue motivada por los intentos del gobierno de ahorrar en el presupuesto, así como cambios significativos en las cuotas y contribuciones personales exigidas a los ancianos australianos.
En el informe se indica la necesidad de aumento significativo de la financiación y están a favor de una tasa, similar pero distinta a la de Medicare, para recaudar fondos de los contribuyentes.
Pagone cree que la Comisión de Productividad debería encargarse de investigar y determinar el importe de la tasa, mientras que Briggs -ex directora general de Medicare- ha recomendado una tasa fija del 1%.
Legislación
Para sustituir la Ley de Asistencia a la Tercera Edad, los comisarios han propuesto una legislación que defina la asistencia a la tercera edad, así como un sistema basado en "un derecho universal a una asistencia y unos cuidados de alta calidad, seguros y oportunos".
La ley también consagraría el derecho a no sufrir malos tratos ni negligencia, así como a no sufrir "tratos degradantes o inhumanos ni ninguna forma de abuso", la capacidad de elección sobre sus cuidados y la conservación de la autonomía general, incluida "la libertad de movimiento y la ausencia de sujeciones".
Proveedores de asistencia y mejoras en la fuerza laboral
Una queja común de los defensores de la atención a la tercera edad ha sido la falta de transparencia y de información disponible sobre el rendimiento de los distintos proveedores de atención a la tercera edad, y la preocupación de que los ancianos australianos tomen decisiones desinformadas sobre qué atención elegir.
La comisión ha recomendado un sistema de clasificación por estrellas que califica a los proveedores en función de los niveles de personal, las opiniones de quienes han recibido atención de ese proveedor y otros indicadores de calidad. Las calificaciones se harán públicas en el sitio web My Aged Care.
También se obligará a los proveedores a contar con al menos una enfermera titulada en todo momento.
Los centros estarán sujetos a unas normas mínimas de calidad y seguridad para el tiempo del personal en la atención residencial a la tercera edad.
Los centros de atención residencial tendrían que garantizar un tiempo mínimo del personal con los residentes. Para el 1 de julio de 2022, esto supondría un mínimo de 200 minutos por residente al día para el residente medio, con al menos 40 minutos de ese tiempo con una enfermera titulada.
El sistema necesita una gobernanza más sólida
El informe final pide una gobernanza mucho más fuerte, la regulación de la calidad de la atención, la regulación prudencial y un mecanismo independiente para fijar los precios.
Estos cambios garantizarían que el sistema de atención a la tercera edad "cuasi-mercado", como lo describió el comisario Tony Pagone, estuviera mucho mejor regulado, exigiendo a los proveedores un mayor nivel de atención y pudiendo abordar mejor cualquier carencia de servicios en el sistema. Por ejemplo, podríamos ver la introducción de la atención domiciliaria en lugares donde antes no había servicios de atención domiciliaria.
ImageCríticas al informes
Algunas organizaciones y defensores de los ancianos siguen preocupados por la falta de claridad del informe en cuanto a la forma en que se utilizarán los fondos en el futuro, y por la falta de especificación de que los 190 millones de dólares destinados a los proveedores de atención residencial deben destinarse a proporcionar el personal adicional que tanto se necesita.
La directora general de Aged and Community Services Australia (ACSA), Patricia Sparrow, elogia el informe por establecer un "programa de reformas de gran alcance", pero afirma que la aplicación de las recomendaciones es todo un reto.
"Tenemos que asegurarnos de que ahora trabajamos para lograr esa agenda de reformas, porque lo que queremos hacer y lo que queremos ver es que todos los australianos mayores puedan obtener los servicios que necesitan cuando los necesitan", dijo Sparrow a SBS News.
Aunque dice que necesitará tiempo para analizar los detalles del informe, Sparrow afirma que le siguen preocupando los niveles de financiación y la necesidad de contratar más personal.
La investigación de la Comisión Real mostró que Australia gasta el 1,2% del PIB en atención a la tercera edad, mientras que países similares de la OCDE gastan una media del 2,5%.
"Sabemos que tenemos que emplear más personal, pagarlo mejor y asegurarnos de que está mejor formado", dijo Sparrow.
La doctora Sandra Iuliano, nutricionista e investigadora de la Universidad de Melbourne, lleva años estudiando la calidad de la alimentación en los centros de atención a la tercera edad. El informe ha marcado un aumento de 10 dólares por residente y día para la nutrición, lo que, según la doctora Iuliano, es "fantástico".
"Es la mayor ventaja. Es bueno que se reconozca que hay que destinar más fondos para ofrecer una mejor alimentación a los residentes".
Pero Iuliano dice que es importante mirar las directrices dietéticas para los adultos mayores antes de los presupuestos.
"Tenemos que buscar ingredientes de calidad siempre que sea posible, por ejemplo, pescado fresco en lugar de pescado precocinado e importado".
Si el presupuesto no da para más, los 10 dólares extra al día son "al menos un buen comienzo", dice.
Por su lado, ell director general de Councils on the Ageing, Ian Yates, dijo que la gobernanza del sistema de atención a la tercera edad comienza con el gobierno, no con los proveedores de atención a la tercera edad, y que el Gobierno de Morrison necesita hacer reformas estructurales para garantizar que las recomendaciones puedan aplicarse lo antes posible.
"Cuando se trata de la crisis que consume nuestro sistema de atención a la tercera edad, los comisionados reales son unánimes en identificar los problemas de negligencia, abuso, indiferencia y mal liderazgo", dijo Yates en un comunicado.
"Ahora es tarea del gobierno federal trazar las reformas estructurales necesarias para construir un sistema más seguro, accesible y transparente de forma responsable".
La portavoz laborista en materia de Atención a la Tercera Edad, Clare O'Neil, dijo que, aunque todavía no podía comentar los detalles del informe, estaba "realmente preocupada" por lo que haría el Gobierno de Morrison con las conclusiones de la comisión.
"Se les da bien decir las cosas correctas sobre cómo respetan a los ancianos australianos y luego entran en una sala del gabinete y recortan la financiación de este sector crítico y parecen sorprendidos cuando las cosas van mal", dijo la Sra. O'Neil a los periodistas el lunes.
Con información adicional de The Guardian, The Conversation y The SMH.
