Las autoridades han levantado la voz de alarma al detectar pérdida de coral en la parte norte del arrecife, cerca de la Isla del Lagarto, justo en el área menos contaminada de la barrera.
Lo que ha sucedido es que la temperatura en la superficie del océano ha subido hasta 33 grados centígrados en febrero estresando el coral hasta el punto que éste expulsa las algas con las que vive en simbiosis y las responsables de su color.
Si el blanqueamiento no se revierte el coral muere.
Esta mañana Anna Sagristà ha hablado con el oceanólogo de la Universidad de Australia Occidental Juan Pablo d´Olivo. Escucha aquí la entrevista.